El reportero Greg Palast.

Olvídense del traje naranja. Exxon Mobil Corporation, que admite haber estado detrás de la querella presentada por el Departamento de Seguridad Nacional (Homeland Security) contra mi y el productor televisivo Matt Pascarella, ha informado que la petrolera no retirará los cargos que aducían que yo mismo y Pascarella amenazábamos «infraestruturas vitales».

El supuesto delito, que nos colocaba en el lado equivocado de la calle respecto a la ley antiterrorista post 11 de de septiembre, era el que hubiéramos filmado imágenes de la refinería de Exxon en Batton Rouge, cerca de la cual, 1600 supervivientes del huracán Katrina permanecen confinados tras una alambrada metálica.

Yo, he jurado al Departamento de Seguridad Nacional que ya no enviamos nuestras imágenes a Al Qaeda, quien, en cualquier caso, puede obtener una vista mucho mejor de la refinería y otras «infraestructuras vitales» en los mapas que proporciona Google.

En vista de la espantada de Exxon, confío en que Exxon Batton Rouge me confirmará que efectivamente, se retirarán los cargos hoy.

Matt y yo queremos agradecer a los lectores y espectadores su extraordinaria y sincera respuesta. El apoyo del público sin duda ha llevado a a Exxon a batirse en retirada.

Por supuesto, el meollo de la cuestión nunca fué que informáramos a Osama de que Louisiana tiene refineías y sí, en gran medida, la sensibilidad de un gigante petrolero ante la perspectiva de que se ofrecieran imágenes poco favorecedoras de sus plantas, que son una importante fuente de contaminación a lo largo del conocido «Corredor del Cancer» de Louisiana.

He sabido que en abril del pasado año, Exxon presentó ante el Departamento de Seguridad Nacional cargos similares contra Willie Fontenot, ayudante del fiscal general de Louisiana. Fontenot hacía de guía para un grupo de estudiantes de estudios medioambientales del Antioch Collage que se encontraban visitando el Corredor del Cáncer.
Las quejas por parte de Exxon de que las fotos de la instalaciones de Exxon tomadas por el grupo suponían una amenaza para la «seguridad nacional» le costaron el puesto a Fontenot.

La cuestión no es la seguridad nacional, sino la seguridad de la imagen (de Exxon). Uno puede conseguir los minutos de filmación que desee de la propia Exxon siempre y cuando acepte las bellas y asépticas imágenes de sus comunicados de prensa en vídeo (VPRS en sus siglas en inglés) mostrando chimeneas rodeadas de garzas felices.

Lo peligroso no es que los reporteros acaben en Guantánamo; el insidioso resultado de estas amenazas es el evitar que las cadenas de televisión filmen la basura, incompetencia y falta de humanidad del gobierno y la gran empresa. Además de la insensatez de Exxon, a nuestro cámara también le fue vedado el filmar en el interior del famoso campamento de caravanas de los supervivientes de Katrina

Lo que es más, ese mismo día, unas horas antes, un subcontratista de la Agencia Federal para la Gestión de Desastres (FEMA en sus siglas en inglés) había agarrado nuestra cámara cuando nuestras preguntas, correctas pero certeras, dejaron al descubierto su mala actuación.

Al igual que en el caso de Exxon, la prohibición de filmar en el campo de refugiados y en las oficinas del subcontratista se nos presentaron como «cuestión del Departamento de Seguridad Nacional».

Tras los ataques del 11 de septiembre, el reportero de CBS Dan Rather dijo que «George Bush es el presidente y sólo tiene que decirme dónde y allí estaré».

Los reporteros que se desmarcan, que hacen preguntas incómodas y filman escenas incómodas, en seguida ven cómo sus carreras se resienten, tal y como puede atestiguar Dan.

Una de las actuaciones más extrañas de George Bush (y ya es decir) fue el hacer que la Agencia Federal para la Gestión de Desastres (FEMA en sus siglas en inglés), cuyo cometido principal es salvarnos de inundaciones y terremotos, pasara a depender del Departamento de Seguridad Nacional. Las refinerías de Exxon, en otro tiempo «focos de contaminación» bajo la escrutadora mirada de los «perros guardianes» del gobierno, son ahora «infraestuturas vitales» protegidas por los «sabuesos» federales.

A medida que el frente en la Guerra contra el Terror se extiende de Bagdad a Batton Rouge, vemos que los Estados Unidos solamente están seguros frente a las noticias difíciles de tragar y los hechos incómodos.

Así pues, nuevamente, nuestro más sincero agradecimiento por su apoyo. Hemos dado cuenta de los panes con limas escondidas dentro.

Traducción
Helena Álvarez de la Miyar
Traductora e intérprete, Master of Arts Monterey Institute of International Studies.

Greg Palast, New York, 14 de septiembre de 2006.