Habitantes de los poblados libaneses de Khirbit Silm y Tulin se enfrentaron a los soldados franceses de la Fuerza Interina de las Naciones Unidas en el Líbano (FINUL) el 29 de junio, así como el 3 y el 4 de julio de 2010.

La población de esas dos localidades del sur del Líbano comenzó una serie de protestas cuando los cascos azules penetraron en sus poblados para realizar maniobras a espaldas del ejército libanés. Los pobladores estiman que los cascos azules (franceses) actuaron fuera del marco del mandato de la FINUL y señalan que tomaron fotos, interrogaron a la gente para identificar a los miembros de la Resistencia y violaron la propiedad privada de los habitantes.

Según el guión del ejercicio de la FINUL, el Hezbollah había atacado el territorio israelí con una andanada de cohetes y la FINUL asumía la defensa del Estado hebreo.

El ministro de Defensa francés, Hervé Morin, expresó recientemente su deseo de modificar las reglas de combate de la FINUL y de incorporar a dicha fuerza de la ONU una unidad similar al GIGN (Grupo de Intervención de la Gendarmería Nacional, fuerza de asalto de la gendarmería francesa de corte más bien policial que actúa esencialmente en situaciones especiales. NdT.) para registrar las casas de los presuntos miembros de la Resistencia en busca de armas.

Dos soldados resultaron heridos en los enfrentamientos contra los aldeanos, armados de palos y piedras.

Un vocero del Hezbollah, Ammar Moussawi, declaró que el objetivo de las provocaciones de la FINUL y de los incidentes a los que han dado lugar no es otro que poner al ejército libanés en una situación embarazosa y estimó que la manipulación ha fracasado.

El ejército libanés deploró por su parte que los miembros de la FINUL actuaran sin coordinación previa con las fuerzas armadas del Líbano y reafirmó que estas últimas garantizan la protección de la FINUL. El jefe del Estado Mayor libanés reveló que Israel pidió a los soldados franceses de la FINUL que registraran las casas de miembros del Hezbollah. Reafirmo además que la defensa del Líbano exige la mayor coordinación entre el ejército libanés y la Resistencia nacional.

Una personalidad cercana a la Resistencia libanesa declaró al diario As-Sharq al-Awsat que los hechos anteriormente mencionados forman parte de un plan francés de injerencia.

El 9 de julio de 2010, el Consejo de Seguridad de la ONU adoptó una declaración que ratifica la misión de la FINUL, declaración cuyo texto fue redactado por Francia.

Al recibir en París al primer ministro libanés Saad Hariri, el presidente francés Nicolas Sarkozy lanzó a su invitado una advertencia en cuanto a la situación en el sur del Líbano.