El Hezbollah ha confirmado el arresto de Mohammad Chawraba, cuadro de muy alto nivel en la dirección de ese partido y jefe de la Unidad 910, a cargo de las operaciones externas.

Según se ha indicado, Mohammad Chawraba, hizo fracasar en 5 ocasiones intentos de respuesta al asesinato del jefe militar del Hezbollah Imad Moughniyé, perpetrado en 2008. Este espía de Israel también parece haber proporcionado información destinada a permitir que el Mosad, servicio de inteligencia de Israel, lograra hacer creer que el Hezbollah estaba implicado en el atentado perpetrado en Bulgaria, en 2012, contra un grupo de turistas israelíes. También provocó el arresto, en octubre de 2014, de Mohammad Amadar, emisario del Hezbollah en Perú.

Según la prensa libanesa, Mohammad Chawraba fue reclutado por el Mosad durante un viaje al extranjero y habría recibido más de un millón de dólares como pago de los servicios especiales israelíes.

Es la primera vez que se anuncia el arresto de un agente israelí a tan alto nivel de la dirección de la resistencia. Un insistente rumor sobre la existencia de una fuente que estaba proporcionando información a Israel desde el seno mismo de la alta dirección del Hezbollah venía circulando desde hace varios años y, poco antes del arresto del espía, el Comité Militar secreto había decidido crear una nueva unidad paralela a la Unidad 910, incluyendo en ella algunos Guardianes de la Revolución iraníes.

El arresto anunciado representa un golpe particularmente importante para Israel, que probablemente no contará ya con ninguna fuente de información en los altos niveles de la resistencia libanesa.