De 2001 a 2007, Petróleos Mexicanos y sus cinco subsidiarias gastan más de 7 mil millones de pesos en “asesorías y consultorías”; de esta cifra, el 50.3 por ciento es erogado por Pemex Refinación. En lo que va del gobierno de Felipe Calderón, el egreso por estos conceptos asciende a 253 millones 485 mil pesos.
En el sexenio de Vicente Fox y en el primer año de la gestión de Felipe Calderón, Petróleos Mexicanos (Pemex) y sus cinco subsidiarias –Refinación; Exploración y Producción (PEP); Petroquímica, Gas y Petroquímica Básica (PGPB), y PMI Comercio Internacional– gastan 7 mil 163 millones 886 mil pesos en 316 “asesorías” y “consultorías”.
La contratación más costosa acapara el 36.5 por ciento de los 7 mil millones: signada el 19 de diciembre de 2005 por Pemex Refinación y la trasnacional DuPont, ésta tuvo por objeto la “consultoría en evaluación de proyectos”.
Se trata del contrato 4500181505, que involucra 248 millones 815 mil 594 dólares más 23 millones 230 mil 129 pesos; es decir, 2 mil 635 millones 793 mil 866 pesos, según se desprende de uno de los seis informes obtenidos por medio de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental.
Dicha cifra supera en 1 mil 244 por ciento la inversión de DuPont en investigación y desarrollo, por apenas 20 millones de dólares anuales, y representa 0.93 por ciento de sus ingresos totales en el ejercicio 2005, por 26 mil millones, de acuerdo con información publicada en su página de internet.
La contratación ocurrió a inicios de la administración de José Antonio Ceballos Soberanis, aún director de Pemex Refinación. No obstante, durante la gestión del actual senador Juan Bueno Torio –quien renunció el 15 de diciembre de 2005–, DuPont obtuvo el contrato 4500181505 (número idéntico al anterior), para los “servicios de seguridad de asistencia y capacitación para la implantación de un sistema de seguridad, salud y protección ambiental”.
Éste se firmó el 15 de noviembre de ese mismo año y el procedimiento fue por invitación a cuando menos tres personas. El costo ascendió a 23 millones 230 mil 129 dólares, que equivalen a 243 millones 916 mil 354 pesos.
PGPB también otorgó dos contratos a DuPont, ambos por adjudicación directa; el 5400013343, en julio de 2001, por “servicios técnicos especializados de consultoría para el programa Sspauptime”, que comprometió recursos por 12 millones 482 mil 500 dólares (131 millones 66 mil 250 pesos, a un tipo de cambio de 10.5 pesos por dólar); y el 5400019140, en julio de 2004, por los “servicios técnicos especializados de consultoría para la implantación del sistema de administración de ejecución disciplinada Saed”; por éste, la filial pagó 14 millones 829 mil 868 dólares, es decir, 155 millones 713 mil 614 pesos.
El 14 de noviembre de 2005 la trasnacional obtuvo un quinto contrato, esa vez de Pemex Petroquímica. Se trata del 40002388, para la “implantación de un sistema de seguridad, salud y protección ambiental”. El monto fue de 10 millones 871 mil 727 dólares, que equivalen a 114 millones 153 mil 141 pesos.
Hasta diciembre de 2007, DuPont facturó 3 mil 280 millones 643 mil 217 pesos por asesorías y consultorías, a pesar de que su información corporativa no las incluye en su lista de servicios y productos. La cifra equivale al 45.8 por ciento de los recursos destinados por la petrolera y sus subsidiarias a las contrataciones por estos conceptos. Al cierre de la edición, ni Pemex ni la trasnacional dieron respuesta a las solicitudes de entrevista hechas por Fortuna.
Gasto millonario
Además de los dos contratos que dio a DuPont, Pemex Refinación signó otros 117. El gasto total de esta subsidiaria por asesorías y consultorías, en el periodo de 2001 a 2007, asciende a 3 mil 605 millones 93 mil 318 pesos: 281 millones 837 mil 644 dólares y 645 millones 798 mil 48 pesos.
Para el perredista Ramón Pacheco, secretario de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados, “Pemex no solamente derrocha dinero vía subcontratación, sino que simula estos gastos de asesoría, que son escandalosos”.
El legislador indica que las contrataciones por estos servicios son “parte del botín que Pemex ha ido compartiendo con las empresas. También a través de los Pidiregas (Proyectos de infraestructura diferida en el registro del gasto) lo ha hecho. Es un escándalo el contratismo en Petróleos Mexicanos”.
De acuerdo con la información, PEP firmó 123 contratos que comprometieron recursos por 1 mil 958 millones 780 mil 868 pesos. En ese mismo lapso, Pemex corporativo convino 49 de estos servicios que significaron un gasto de 800 millones 602 mil 368 pesos, más 331 mil 300 libras esterlinas.
En cuarto lugar, respecto de las erogaciones, se ubica Pemex Gas y Petroquímica Básica, que destinó 634 millones 172 mil 617 pesos para el pago de siete consultorías. Pemex Petroquímica gastó 137 millones 739 mil 141 pesos en 11 contratos; mientras que PMI Comercio Internacional sufragó 27 millones 497 mil 867 pesos, por siete asesorías.
El diputado panista David Maldonado, presidente de la Comisión de Energía, explica que en el presupuesto de egresos de 2008, para cubrir este tipo de servicios, se aprobó un gasto cercano a los 9 mil millones de pesos.
Maldonado indica que los grupos parlamentarios deben trabajar para reducir las partidas destinadas a estos rubros. “Los legisladores no contamos con información respecto de la efectividad de estas asesorías, qué función cumplen ni qué es lo que están realizando”.
Por ello, dice, “pedimos al ejecutivo federal que se nos informe trimestral o semestralmente de las asesorías que se les están dando a Pemex, porque se desconoce exactamente qué es lo que se está haciendo”.
Los contratos
DuPont no ha sido la única empresa beneficiada con estas contrataciones. El rentable negocio queda en manos de un centenar de empresas privadas y profesionales independientes, revelan los seis informes obtenidos por Fortuna.
En su mayoría, las asesorías y consultorías contratadas son para los rubros legal, administrativo, mercadotécnico, de ingeniería, auditoría, dictámenes de estados financieros y proyectos; también hay ámbitos menos tradicionales, como el reflejado en el “estudio de mercado para el ingreso de Pemex al mercado de remesas” o las “valuaciones actuariales de los pasivos laborales contingentes”.
Para estos servicios, en la administración de Vicente Fox y en lo que va del gobierno de Felipe Calderón, Pemex y sus filiales han signado 316 contratos; 74 de éstos superan los 10 millones de pesos, mientras que el monto más bajo, sólo registrado en una contratación, asciende a 2 mil pesos.
De las 92 compañías privadas, 12 profesionales independientes y 14 instituciones públicas que participan, siete fueron requeridas en cinco o más ocasiones: Instituto Mexicano del Petróleo, 40; Pricewaterhouse Coopers, 27; McKinsey & Company, 15; Instituto de Investigaciones Eléctricas, seis; DuPont, cinco; Mercer Management, cinco; Galicia y Robles, SC, cinco.
Para el panista David Maldonado, Pemex y sus cinco subsidiarias –“cada una, incluida la dirección general, tiene (gastos por) consultorías y asesorías”–, han “despilfarrado” el recurso. “Esto es algo que debemos tener muy en cuenta los diputados; y si en su momento encontramos una situación irregular comprobable, obviamente haremos lo correspondiente ante la contraloría”.
Marzo 15, 2008
Baja productividad en Pemex: Rangel Domene
Mientras Petróleos Mexicanos y sus cinco subsidiarias destinan más de 7 mil millones de pesos a asesorías y consultorías, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) señala que la petrolera tiene la más baja productividad respecto de las grandes firmas internacionales.
En entrevista, el ingeniero Héctor Rangel Domene, quien encabeza el CEESP, explica que “las comparaciones internacionales que se pueden hacer de Pemex contra otras petroleras la dejan mal parada, tanto en pozos perforados, porcentaje de aprovechamiento de éstos, productividad laboral”.
Agrega que las ineficiencias de la compañía se deben a varios factores: su organización, las restricciones de empresa pública sujeta a la Ley de Obras y Arrendamientos Públicos, la escasa inversión, el contrato colectivo de trabajo –“que es muy oneroso”–, y en el tema de seguridad industrial Pemex tiene un mal récord por los accidentes frecuentes.
Para el presidente del consejo de administración de BBVA Bancomer, la paraestatal requiere un cambio profundo a su régimen, que dé más apertura al capital privado nacional y extranjero. “Tendrían que empezar por el tema de asociaciones: compartir el riesgo con otras compañías; permitir la inversión privada en muchos aspectos de la industria petrolera; modificar el contrato colectivo de trabajo y el régimen fiscal; quitarle reglamentación y control de la Ley de Obras Públicas”.
Rangel Domene dice que, “si queremos que Pemex esté a la vanguardia, necesita asociarse con empresas que tienen la tecnología para perforar en aguas profundas. No tiene por qué ser un monopolio absoluto. Hay muchísimos aspectos en los que la iniciativa privada puede perfectamente participar”.
El empresario espera que las modificaciones legales, incluso constitucionales, se den antes de que Felipe Calderón Hinojosa concluya su gestión. De lo contrario, advierte, en unos 10 años, cuando se hayan agotado las reservas, México tendrá que recortar o anular el gasto social en educación, salud, alimentación.
Respecto de los costos de la privatización de la petrolera, entre éstos la pérdida de soberanía energética, Rangel Domene dice que se trata de una “soberanía malentendida”: no existen. Se olvida que el 34 por ciento de los ingresos del gobierno federal depende de Pemex y que en nueve años se van a agotar las reservas. (NF)
Manténgase en contacto
Síganos en las redes sociales
Subscribe to weekly newsletter