Washington solicitó al gobierno de Canadá el arresto de Meng Wanzhou (ver foto) y su extradición a Estados Unidos. Meng Wanzhou, directora financiera de Huawei e hija del fundador de ese gigante chino de las telecomunicaciones, fue arrestada en Canadá el 6 de diciembre de 2018.
La guerra que Washington ha iniciado contra Huawei tiene muchas justificaciones que sólo sirven de fachada para esconder la verdadera razón de la embestida del gobierno de Estados Unidos contra esa importante empresa china.
La verdadera causa es que Huawei utiliza un sistema de encriptación que impide a la NSA [1] estadounidense interceptar los teléfonos móviles de esa marca china.
Fuera del mundo occidental, los gobiernos y servicios secretos de numerosos países han comenzado a equiparse con material de telecomunicaciones de la marca china Huawei para garantizar la confidencialidad de sus comunicaciones.
Las justificaciones de fachada han ido, según el momento, desde problemas en materia de propiedad intelectual hasta vínculos comerciales con Irán y Corea del Norte o supuestas violaciones de las reglas en materia de competitividad comercial, afirmando que esa empresa recibe subvenciones del Estado chino.
Los países miembros del sistema de espionaje anglosajón conocido como los “Cinco Ojos” –Australia, Canadá, Estados Unidos, Nueva Zelanda y Reino Unido–, grandes consumidores de equipos de telecomunicación que utilizan precisamente para espiar las telecomunicaciones mundiales, han comenzado a excluir a Huawei de sus licitaciones.
[1] La NSA (National Security Agency) es la agencia de inteligencia estadounidense que se encarga de espiar las telecomunicaciones a nivel mundial. El trabajo de espionaje de la NSA salió súbitamente a la luz pública en 2013, cuando uno de sus empleados –Edward Snowden– denunció públicamente las actividades de la NSA, que espía incluso las telecomunicaciones de países y gobiernos aliados de Estados Unidos. Nota de la Red Voltaire.
Manténgase en contacto
Síganos en las redes sociales
Subscribe to weekly newsletter