La integración reciente del Consejo Nacional del Partido Acción Nacional (PAN) obedeció más a la capacidad del gobierno de Felipe Calderón de cooptar a la mayoría de los aspirantes con un puesto en la administración pública, que a una verdadera participación democrática.

Con poco tiempo en el poder, la corrupción también empieza a aflorar en los gobiernos panistas. En sus tres últimas ediciones, el periódico Hora Cero documentó este fenómeno en la alcaldía de Reynosa, Tamaulipas, encabezada por Francisco García Cabeza de Vaca, quien “ha entregado contratos de obra pública a familiares consanguíneos y políticos a través de prestanombres”.

Dos destacados panistas, el senador Fernando Elizondo Barragán y Gustavo Cárdenas, director de Apoyos y Servicios a la Comercialización Agropecuaria (Aserca) de la Sagarpa, denuncian, por separado, cómo son estos procesos internos, los cuales son fácilmente manipulables para orientar la elección hacia un candidato predeterminado.

Ambos aspiran a gobernar los estados de Nuevo León y Tamaulipas, respectivamente.

Elizondo Barragán, quien fue secretario de Energía en el sexenio de Vicente Fox, dice que su participación como aspirante a candidato a la gubernatura de Nuevo León dependerá de si se mantienen o no en su partido las reglas para la selección de candidatos.

“Tenemos que superar una serie de dificultades internas, porque sí creo que se han desarrollado prácticas incorrectas.”

–¿El cambio de reglas podría ayudar a escoger a un mejor candidato?

–Por supuesto, porque la regla actual determina que sean los miembros activos los que eligen el candidato. Eso ha originado que haya una enorme manipulación por hacer ingresar a simpatizantes de determinados grupos, los que de repente tienen el control de acceso.

“Eso ha derivado en una tendencia a comprar votos, porque es una base de electores muy pequeña y fácil de comprar una parte substancial de ella, para influir en la elección. Cuando digo ‘comprar’, digo dar beneficios a cambio: un empleo o un beneficio de otra naturaleza. Estas perversiones de afiliación, de compra de votos anticipadamente, son posibles porque tenemos una base muy pequeña de electores”.

–¿Cómo podría ser el cambio?

–Hacia un procedimiento que reconozca a factores externos y que le dé decisión también a la gente que está más allá del bien y del mal en el partido, y que no vela por intereses, sino por principios y por ideales. Porque aquí lo que ha sucedido es que los intereses están compitiendo con los principios.

–Coincide con quienes afirman que el PAN está perdiendo sus principios por los intereses.

–No es que los esté perdiendo, sino que en la medida en que se ha vuelto ganador, han surgido intereses. Hay mucha gente que ve en estos caminos hacia una posición de poder o hasta una posición remunerada. Cuando se ve así la cosa, los ideales que unían, se convierten en grupos de intereses que desunen.

A Elizondo Barragán, por otra parte, le dan “bastante risa” las versiones que lo sitúan como el candidato preferido del gobernador de Nuevo León, Natividad González Parás, para sustituirlo en el cargo, no obstante que uno es panista y el otro priísta.

“Se me hace ridícula la afirmación y mala fe de quien proporcionó esa información. Evidentemente, todo está relacionado con la lucha interna que se está dando en mi partido, pero también me parece ridícula, porque está clarísimo que el PRI está impulsando sus propios candidatos y moviendo su propio juego. No tiene absolutamente nada de realidad”.

–¿Qué pasa con la lucha interna de su partido?

–Los posibles aspirantes a la candidatura para 2009 ya están todos trabajando y hay grupos de interés que los apoyan y se oponen unos a otros. Yo no soy el que les va a poner nombres, la gente sabe, son varios.

Aunque el relevo de Natividad González Parás será dentro de dos años, la carrera por la gubernatura empieza a tener velocidades insospechadas.

Fernando Elizondo Barragán no se descarta para esta competencia, no sólo porque ya probó las mieles del poder cuando sustituyó en la gubernatura a Fernando Canales Clariond, de enero a octubre de 2003, sino porque “su trayectoria se lo pide”.

Abogado por la Universidad Autónoma de Nuevo León, maestro en Jurisprudencia por la Interamerican Law Institute de la Universidad de Nueva York y maestro en Administración de Empresas con especialidad en Finanzas por la ITESM de Monterrey, Elizondo Barragán se ha desempeñado en el sector privado y en el sector público.

Ha sido representante de las cúpulas empresariales regiomontanas y ocupó diversas posiciones directivas en el área legal del Grupo Industrial Alfa y fue presidente ejecutivo del Grupo Salinas y Rocha.

En su actividad política, se desempeñó como secretario de Finanzas del gobernador Fernando Canales Clariond. El presidente Vicente Fox lo nombró secretario de Energía, en donde también estuvo poco tiempo, de junio de 2004 a septiembre de 2005, porque se lanzó como candidato al Senado por el PAN.

“Quiero mantenerme como una alternativa para recuperar el gobierno del estado de Nuevo León, porque me interesa muchísimo y me parece prioritario que haya alternancia, porque si no hay alternancia no va a haber competencia, y no va a haber mejoría. Para nosotros, como parte de Acción Nacional, recuperar el gobierno en 2009, es absolutamente prioritario”.

Prácticas ilegales

Gustavo Cárdenas, quien fue presidente municipal de Ciudad Victoria, Tamaulipas, senador y diputado, advierte de prácticas corruptas en el PAN en la selección de candidatos.

“Hay una situación: el partido ha crecido mucho y ya ha estado gobernando. Lamentablemente, a la hora de ejercer el poder se puede caer en prácticas de corrupción. Creo y considero que una de las formas de hacer que el partido no caiga tanto en ese tipo de acciones es a través de la participación abierta”.

Explica Cárdenas “que no nada más recaiga en un padrón, sino que busquen mecanismos para ir abriendo el partido a la sociedad, hacia diferentes personas. Incluso que se pudiera ejercer una decisión más abierta, para consensuar con mayor fortaleza los posibles candidatos que pudieran representarnos en puestos de elección popular”.

–¿Los procesos internos del PAN no son del todo democráticos?

–Sí son democráticos. El problema es que están muy cerrados. Eso conlleva a prácticas que no son muy transparentes, porque se manipula a la gente, se le coacciona al voto en un universo muy pequeño, y se podría prestar para actitudes que llevaría a una práctica desleal, ilegal y de manipulación. Creo que ahí es donde debemos de cuidar mucho que nuestro partido no caiga en este tipo de prácticas.

Cárdenas Gutiérrez fue electo diputado federal en la LX Legislatura, pero el pasado mes de diciembre solicitó licencia para formar parte del gabinete de Calderón Hinojosa como director de Aserca de la Sagarpa, que se encarga del Procampo y otros programas, con un presupuesto de 30 mil millones de pesos y atiende a 2 millones 750 mil mexicanos.

Fue candidato del PAN a la gubernatura de Tamaulipas en 1998 y 2004, y anuncia que buscará ser el abanderado de su partido por tercera ocasión, dentro de tres años. “No pienso descartarme ni quitar el dedo del renglón. Creo que todavía hay Gustavo para rato. Además, el deseo por servir a mi estado nunca se me ha quitado. Es un deseo real, auténtico, y bueno todo llegará en su momento”.

Su entidad, Tamaulipas, es un ejemplo de lo que sucede en los procesos internos del PAN en el país. Hay una contienda intermedia en puerta para renovar alcaldías y el Congreso local.

Lo que le preocupa, dice, “es que no haya imparcialidad por parte de las autoridades o de las personas que estén al frente del Partido Acción Nacional en el estado. Sería muy lamentable, como se ha hecho saber, que de repente se le quiere favorecer a uno de los precandidatos, a una de las personas que andan en la vida política del partido”.

Considera que “es muy lamentable que muchas veces el presidente del partido no tenga la visión de que debe ser imparcial en su función, como un árbitro que no debe de estar actuando de un solo lado. Yo creo que en ese aspecto debe de existir total imparcialidad”.

–¿Se refiere a Francisco García Cabeza de Vaca?

–Se ha comentado muchísimo que se le ha tratando de favorecer por parte del presidente del PAN en el estado. Obviamente, gentes que no simpatizan con un candidato se vean un poquito molestos. Son actitudes. Se hace un llamado con toda la cordura, con todo el respeto y toda la prudencia que debe prevalecer imparcialidad por parte de la autoridad estatal, de la forma en que se debe realizar la elección o llevar el trabajo partidista.

En la sucesión adelantada que se vive en Tamaulipas, el alcalde de Reynosa, Francisco García Cabeza de Vaca, es quien puntea para ser el próximo candidato del PAN a la gubernatura de Tamaulipas. Sin embargo, denuncias periodísticas del diario Hora Cero de Reynosa, sobre corrupción en la obra pública de la alcaldía, pusieron en entredicho su posible postulación.

–Cualquiera diría que el PAN, por ser un partido nuevo en el poder, estaría exento de prácticas corruptas y de abuso del poder que se vivieron en los gobiernos del PRI.

–Ningún partido está exento de corrupción, porque son manejados por personas, quienes pueden caer en tentaciones que los lleven a efectuar actos de corrupción, que verdaderamente se les hace fácil. Pero eso no quiere decir que el partido sea corrupto, porque por principio de cuentas la institución es lo que va a prevalecer.

En Reynosa, dice, “lo grave es que esas personas, en un afán de ambición de poder, pues se quieren apoderar hasta de los recursos y esto es lo lamentable”.

–A nivel nacional, el PAN también padece esta lucha por el poder. Acabamos de presenciar diferencias entre la dirigencia panista y Los Pinos por las elecciones de Yucatán.

–Estoy viendo que últimamente hay un diálogo y una clara intención de que no se lleve a mayores problemas esta situación. Considero que esas diferencias que se pudieron haber dado al principio, ya ahorita se puedan ir resolviendo. El diálogo es el mejor mecanismo para que lleguen a acuerdos reales, tangibles, para poder gobernar, y obviamente el presidente necesita la solidaridad del partido para que pueda seguir gobernando.

“El presidente trae retos muy importantes, sobre todo en el combate al narcotráfico, que es un tema bastante delicado, y considero que es por ahí donde se debe estar trabajando”.

–Pero aquí la cuestión es: ¿Quién se queda con el PAN?, ¿Manuel Espino o Felipe Calderón?

–Creo que son competencias normales que se dan en las internas y el presidente Felipe Calderón es gente que ha salido de las filas del PAN, no es en el caso de Vicente Fox, y él va con ese ánimo. Obviamente, la lucha por la dirigencia de los próximos años va a ser una lucha muy competida, interesante, buena para las dos corrientes que se están viendo en este momento.

–Pero hay inequidad en la contienda. Es la Presidencia contra el líder de su partido, quien no tiene la misma capacidad de cooptar a los panistas.

–Yo no creo que esto no vaya a llegar a mayores. El mensaje del presidente fue muy claro, en el sentido de que se van a mantener unidos los coordinadores de las bancadas, tanto del Senado como de la Cámara de Diputados; dieron sus puntos de vista del tema y la total solidaridad al presidente Felipe Calderón y la total armonía de Manuel Espino.

“Levantones” panistas

En sus tres últimas ediciones, el periódico Hora Cero de Reynosa, Tamaulipas, publicó una serie de reportajes sobre los malos manejos de los recursos públicos del alcalde panista de ese municipio, Francisco Javier García Cabeza de Vaca.

“Este político, emanado del Partido Acción Nacional, asumió el cargo el primero de enero de 2005 y ha entregado contratos de obra pública a familiares consanguíneos y políticos a través de prestanombres. Además, sus dos hermanos, familiares y otros funcionarios municipales se han enriquecido de manera inexplicable en el lapso de la actual administración”, señalan en una carta dirigida al presidente Felipe Calderón.

El diario también descubrió que el alcalde de Reynosa fue fichado en su juventud por el FBI por haber robado objetos del interior de un auto.

Detectó, asimismo, que Mario Gómez Monroy, uno de los funcionarios más influyentes y cercanos al alcalde, como secretario de Servicios Administrativos en Reynosa, compró en los últimos tres años un terreno y una casa en un exclusivo fraccionamiento de Mission, Texas, con un valor cercano al millón de dólares.

Aparte de contar en el mismo lugar con un departamento de 200 mil dólares, y autos de lujo a nombre de su esposa. Su sueldo como funcionario del ayuntamiento es de 24 mil 500 pesos mensuales.

A raíz de esas publicaciones, señalan Heriberto Deándar y Héctor Hugo Jiménez en su carta al presidente, tuvieron lugar una serie de acontecimientos que les preocupan:

“Cinco llamadas telefónicas anónimas donde se lanzan amenazas contra la integridad física del director general y el director editorial general.

“El sábado 3 de junio de 2007 se recibió otra llamada anunciando que se había colocado una bomba en nuestro edificio.

“Un acto intimidatorio del alcalde Francisco Javier García Cabeza de Vaca, quien el 30 de mayo aprovechó la inauguración de una calle aledaña a nuestras instalaciones, para organizar un mitin con guardias armados y lideresas de colonias con antecedentes de violencia, pronunciando un discurso criticando nuestra labor periodística.

“Dos de nuestros reporteros han recibido advertencias de parte de elementos de seguridad del presidente municipal, en el sentido de que los empleados de esta casa editora deben de cuidarse porque pueden sufrir represalias, concretamente los conocidos ‘levantones’”.

Estos incidentes les preocupan porque el contenido de los reportajes atenta contra los intereses económicos de Cabeza de Vaca, “debido a los negocios ilícitos que está haciendo con los recursos públicos”.

Fecha de publicación: Julio 1a quincena de 2007

Fernando Ortega Pizarro