Luego de dos periodos de hegemonía panista en el gobierno federal y en los de algunas entidades, comienzan a salir a la luz varios hechos de corrupción protagonizados por los políticos derechistas. A la vez, se siguen manifestando las tendencias conservadoras de ese partido, opuestas al estado laico, a la despenalización del aborto y a los derechos sexuales.
21. julio, 2013 Edgar González Ruiz * Opinión
Sin arraigo popular, como se evidenció en las elecciones del 2012, los panistas pretenden subsistir electoralmente mediante alianzas oportunistas con el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y otros partidos. Aunque esas coaliciones son ideológicamente contradictorias y sólo resultan indispensables para la supervivencia del Partido Acción Nacional (PAN), hay dentro de la llamada “izquierda” políticos sin escrúpulos que son capaces de alentarlas, con tal de obtener algo para sí mismos.
Así, en Baja California, donde el PAN gobierna desde 1989, el PRD se prestó a servirle de comparsa para que siga prevaleciendo en la entidad.
Corrupción panista
Los panistas llevaron a cabo un manejo abusivo y sectario del gobierno federal. Durante los gobiernos de Fox y Calderón, “la administración pública creció sin control: se crearon áreas administrativas innecesarias, se privilegió el incremento de la estructura de sectores poco sustanciales para el desempeño del gobierno federal, el número de unidades administrativas como coordinaciones y departamentos se multiplicó y el costo del aparato burocrático se duplicó” (http://www.zocalo.com.mx/seccion/articulo/crea-pan-dependencias-a-familiares-137076
Entre 2001 y 2003 comenzaron a crearse plazas de mandos medios y superiores, con el fin de colocar a amigos e incluso familiares, situación que prosiguió durante el sexenio de Calderón.
De las propias filas panistas han surgido acusaciones de malos manejos por parte de Ernesto Cordero y de Juan Ignacio Zavala, cuñado de Felipe Calderón. A Zavala el senador panista Javier Corral lo acusó de ser “todo un vividor del presupuesto público, sin acreditar ningún servicio o trabajo para el Senado de la República o su presidente…”. Además, Corral asegura que se realizaron transferencias económicas a favor de Zavala desde una cuenta del Senado, al parecer sin ningún tipo de justificación. A su vez, Zavala, quien con todo cinismo negó que se tratara de un préstamo “porque no lo voy a pagar”, calificó a Corral de “traidor” y “profesional de las plurinominales” y lo acusó de haberse embolsado más de 21 millones de pesos del erario desde 2000 (http://noticias.terra.com.mx/mexico/politica/javier-corral-y-juan-ignacio-zavala-pelean-en-twitter,e138c2372d75f310VgnVCM5000009ccceb0aRCRD.html).
También en los estados se han comenzado a denunciar las irregularidades de los gobiernos panistas. Uno de los principales casos de corrupción panista en los estados es el del exgobernador de Aguascalientes Luis Armando Reynoso Femat, contra quien en junio se dictó auto de formal prisión por los delitos de peculado y uso indebido del servicio público, por la supuesta compra, en 2008, de un tomógrafo con valor de 13.8 millones de pesos (http://www.aztecanoticias.com.mx/notas/estados-y-df/157730/dictan-formal-prision-a-exgobernador-de-aguascalientes).
Por cierto, en 1998, días antes de tomar posesión de la alcaldía de Aguascalientes, el exmandatario escandalizó a la opinión pública por su rabiosa homofobia que lo llevó a declarar: “Invitaré a mi equipo de trabajo a las mejores personas de Aguascalientes. No importa de qué partido sean, no me importa de qué religión sean, pero no vamos a invitar putos”.
Reynosa Femat, quien fue alcalde de 1999 a 2001 y gobernador de la entidad de 2004 a 2010, en junio de 2004 fue acusado de haber incurrido en tráfico de influencias para obtener el usufructo por 50 años del estadio de futbol de la capital del estado (véase: Alfonso Yáñez Delgado, De Ruffo a Vicente Fox, Puebla Mágica, Puebla, 2005).
Por su parte, regidores priístas de Guadalajara han responsabilizado a las administraciones panistas por la gran deuda que tiene el municipio, y que asciende a 3 mil 957 millones de pesos, que hacen del municipio tapatío el más endeudado del país (http://www.dk1250.com/local/59353-culpan-a-panistas-de-deuda-en-guadalajara.html). También en Guadalajara, en junio de 2013, fue detenido por peculado el exdirector del Sistema Intermunicipal de Agua Potable y alcantarillado (SIAPA), Rodolfo Ocampo Velázquez, acusado de haber desviado parte de 1 mil 200 millones de pesos destinados a infraestructura hidráulica. El exfuncionario es allegado al exgobernador panista Emilio González Márquez, apodado el Góber Piadoso por su fervor católico que lo hizo donar millones de pesos del erario para la construcción de un santuario en honor de los cristeros. Rodolfo Ocampo, quien también fue aspirante a la candidatura por la presidencia municipal de Guadalajara, invirtió parte de los recursos en la Bolsa Mexicana de Valores (El Universal, 8 de junio de 2013).
En el estado de México, algunos líderes panistas han pedido a la dirigencia nacional de su partido que tome medidas ante los señalamientos de supuesta corrupción por parte del coordinador de los diputados blanquiazules en el Congreso estatal, Ulises Ramírez. “En el PAN no queremos tener otro Granier”, afirmó el exdirigente estatal del partido Noé Aguilar Tinajero, en conferencia de prensa acompañado por Astolfo Vicencio Tovar, Víctor Guerrero –ambos fundadores del PAN en el Estado de México– y José Luis Durán Reveles, exalcalde de Naucalpan” (http://www.adnpolitico.com/gobierno/2013/06/06/panistas-en-el-edomex-no-queremos-un-caso-granier-en-el-pan). Ulises Ramírez ha sido señalado por enriquecimiento ilícito, venta de candidaturas, lavado de dinero y participación en giros negros, cargos que el legislador ha rechazado. Cabe recordar que en diciembre de 2012, como coordinador de la bancada panista en el congreso estatal, Ulises Ramírez presentó una iniciativa para incorporar la política antiabortista en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (http://elrostrodelamortalidadmaterna.cimac.org.mx/node/704). En junio pasado, en Ixtapaluca, Estado de México, el regidor panista Javier Romo García, en estado de ebriedad, agredió a dos policías, como se muestra en un video que se difunde a través de internet.
En Morelos también están saliendo a relucir evidencias de la escandalosa corrupción panista (http://www.radioformula.com.mx/notas.asp?Idn=332122). En mayo pasado se dio a conocer que en 11 años el gobierno de Morelos –en las administraciones panistas de Sergio Estrada Cajigal y de Marco Antonio Adame– pagó más de 224 millones de pesos a la empresa Helicópteros y Vehículos Aéreos Nacionales, SA de CV (Helivan), por el alquiler y otros gastos correspondientes sólo a un helicóptero. El actual gobernador, Graco Ramírez, mencionó además que en 2012 la administración de Adame pagó 50 millones de pesos a la empresa Helivan, lo que pudo haber significado que se hicieron unos 250 vuelos por el estado, entre enero y septiembre del mismo año. Anunció que se solicitarán las bitácoras de vuelo para integrar con ello una denuncia por daño patrimonial, ante el pago altísimo que se hizo con Adame Castillo, que calificó como “un acto de corrupción” (El Sol de Cuernavaca, 14 de mayo de 2013). Gracias al ascenso político del PAN, Marco Antonio Adame, quien fue dirigente del grupo católico Testimonio y Esperanza, el mismo que organiza las peregrinaciones al Cerro del Cubilete, se convirtió en gobernador de esa entidad.
El PAN de Dios y sus aliados
En los pocos territorios donde el PAN tiene arraigo, debido a su vez a las influencias históricas del clero católico, los panistas siguen tratando de imponer sus ideas conservadoras.
Por ejemplo, en Guanajuato, los diputados de Acción Nacional en el Congreso local, han advertido que rechazarán la iniciativa de Ley de Sociedades de Convivencia, misma que otorga derechos a las parejas homosexuales. (periódicocorreo.com.mx, 29 de mayo de 2013). A fines de mayo, los diputados panistas Alfonso Ruiz, Sergio Carlo Bernal y Galo Carrillo se opusieron al análisis de la iniciativa presentada por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) desde el mes de febrero, y pidieron elaborar de inmediato un dictamen negativo. Para el diputado panista, Daniel Campos la iniciativa de ley propuesta por el PRI busca legalizar la unión entre personas del mismo sexo, lo cual horroriza a los sectores conservadores y al clero.
Por su parte, apenas en junio pasado, la alcaldesa de Monterrey, la panista Margarita Arellanes Cervantes, en un evento de pastores cristianos, consagró a Jesucristo esa ciudad, por lo que ella supone que en esa metrópolis no caben los agnósticos, los ateos o simplemente los no cristianos, como pueden ser los budistas y los musulmanes. Desde luego, el 12 de diciembre la ultracatólica alcaldesa acudió a la ceremonia guadalupana presidida por el arzobispo de Monterrey, Rodrigo Cabrera.
Incluso en zonas como la ciudad de México, donde el PAN no tiene popularidad alguna, los panistas siguen apoyando al clero católico y grupos conservadores en sus iniciativas contra las libertades sexuales, de suerte que el blanquiazul capitalino todavía está empeñado en una lucha perdida para anular la despenalización del aborto lograda en 2007. Las autoridades de la delegación Benito Juárez, la única que gobierna el PAN en la capital, han establecido un gran entendimiento con las parroquias católicas, como la de La Piedad, a donde citan algunas reuniones vecinales.
En territorios donde se han establecido alianzas entre el PAN y el PRD, como es el caso de Zacatecas con la coalición Rescatemos Zacatecas, esa estrategia puede mantener viva a la derecha y a sus proyectos reaccionarios, como la penalización del aborto y el rechazo del matrimonio homosexual. Evidentemente, si las alianzas entre el PAN y el PRD postulan a candidatos panistas, entonces la izquierda estaría haciendo el papel de comparsa de la reacción, a la que ayudaría a llegar al poder. Un ejemplo de lo indeseable que pueden ser esas alianzas es el gobierno panista y reaccionario de Rafael Moreno Valle en el estado de Puebla, donde en las elecciones de 2010 el PAN llegó al poder gracias al apoyo que recibió del PRD y Convergencia, partidos que formaron coalición con el blanquiazul.
*Maestro en filosofía; especialista en estudios acerca de la derecha política en México
Fuente: Contralínea 344 / julio 2013
Manténgase en contacto
Síganos en las redes sociales
Subscribe to weekly newsletter