Desde noviembre de 2018, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, había denunciado el entrenamiento de mercenarios proestadounidenses en suelo colombiano. El presidente Maduro precisaba entonces que esos elementos iban a ser utilizados en una operación de bandera falsa para simular un ataque militar de Venezuela contra Colombia, con lo cual se crearían las condiciones para desatar una guerra en América Latina.
El 1º de marzo de 2019, Freddy Bernal, responsable gubernamental bolivariano nombrado protector del Estado venezolano de Táchira y director nacional de los CLAP [1], denunció que ACNUR (el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados) está garantizando el alojamiento en Colombia a 435 mercenarios y desertores venezolanos.
El dirigente bolivariano precisó que esos individuos se alojan actualmente en los hoteles Bolívar, Caravana y Cavalier, en la localidad colombiana de Cúcuta –limítrofe con Venezuela– y que están bajo las órdenes del general traidor venezolano Clíver Alcalá Cordones, con el objetivo de participar en la operación de bandera falsa ya denunciada por el presidente Nicolás Maduro.
No está de más recordar que, en noviembre de 2011, el representante especial del secretario general de la ONU para Libia, Ian Martin (ex director mundial de Amnistía Internacional), organizó el traslado por barco de 1 500 miembros de al-Qaeda en Libia.
Aquellos yihadistas, bajo las órdenes de los libios Abdelhakim Belhaj (ex número 3 de al-Qaeda) y Mahdi al-Harati, llegaron así a Turquía, donde fueron acantonados en un campamento del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), cargo ocupado en aquella época por el hoy secretario general de ONU Antonio Guterres.
A un grupo de diputados turcos que quiso visitar aquel campamento de “refugiados” –campamento donde sólo había hombres– se le impidió entrar en la instalación. Desde allí, el servicio secreto de Turquía (MIT) se encargó de transportar en autobuses a los supuestos refugiados hasta la región siria de Jabal al-Zouia, donde esos yihadistas libios constituyeron la primera unidad del mal llamado «Ejército Sirio Libre». Fue precisamente en ese lugar donde se rodaron los videos sobre la «revolución siria» posteriormente divulgados al mundo entero por los grandes medios de prensa de Occidente y de las monarquías del Golfo.
Todo lo anterior fue revelado después al Consejo de Seguridad de la ONU por el embajador de la Federación Rusa, Vitaly Churkin.
El actual Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados es Filippo Grandi, quien fungía en 2011 como adjunto de Antonio Guterres.
[1] Los CLAP (Comités Locales de Abastecimiento y Producción), son órganos creados por el gobierno bolivariano para garantir la distribución de alimentos subvencionados a toda la población de Venezuela. Nota de la Red Voltaire.
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