Se perfila maniobra desestabilizadora en Ucrania

Mientras prosigue su guerra contra la población rusoparlante del Donbass, ‎el gobierno ucraniano dice sentirse cada vez más amenazado por su vecino ruso. ‎

De visita en Washington, el ministro de Defensa ucraniano, Oleksiy Reznikov, dijo al secretario ‎de Defensa estadounidense, el general Lloyd Austin, y a la subsecretaria de Estado Victoria ‎Nuland que, luego de haber otorgado la nacionalidad rusa a casi toda la población del Donbass, ‎Moscú se dispone a organizar manifestaciones en toda ‎Ucrania para desacreditar al gobierno de Kiev y favorecer así la independencia de las regiones ‎ucranianas donde predomina la población rusa. ‎

El jefe de la inteligencia ucraniana, general Kyrylos Budanov, hizo declaraciones similares al medio ‎estadounidense Military Times y afirmó que, si fracasara esa operación, Rusia intervendría ‎militarmente en defensa de las poblaciones rusoparlantes [1].‎

Sin embargo, el Washington Post estima que el presidente ruso, Vladimir Putin, no ha tomado ‎ninguna decisión en ese sentido [2]. ‎

Según la Constitución de la Federación Rusa, el presidente ruso es personalmente responsable de ‎la seguridad de los ciudadanos rusos en el exterior. ‎

En el caso específico de Ucrania, Estados Unidos rechaza el derecho de los pueblos a disponer ‎de sí mismos ya que Washington considera la independencia del Donbass y su eventual ‎incorporación a la Federación Rusa como un intento inaceptable de anexión. El 31 de agosto ‎de 2021, Estados Unidos se comprometió incluso a aportar asistencia militar al gobierno ‎ucraniano en caso de intervención rusa. ‎

Los Acuerdos de Minsk debían poner fin a la crisis ucraniana mediante la concesión de garantías a ‎las poblaciones rusoparlantes, pero nunca fueron respetados por los sucesivos gobiernos ‎ucranianos y Kiev prosigue actualmente la guerra contra su propia población. ‎