La posibilidad de aprobar antes de fin de año la ley que separa las elecciones a los alcaldes, consejales y juntas parroquíales de las elecciones a gobernadores y legisladores estadales, ha provocado la reacción negativa de la oposición que cree poder capitalizar el triunfo del no en el referendum constitucional del pasado 2 de diciembre en estos comicios
En general, la separación de las elecciones comunales de las nacionales y de gobernadores es considerada un paso adelante en la democratización y participación de los ciudadanos a la hora de elegir a sus gobernantes y representantes locales. Cuánto más se separa la elección local de las nacionales, menor es la influencia de los líderes y partidos nacionales, y más se valora la actuación cotidiana de los gobernantes.
A nivel comunal o parroquial se hace más difícil establecer liderazgos a la sombra de los dirigentes nacionales, ya que la comunicación entre los gobernantes locales y la población es más fluida y de alguna manera existe un mayor control aunque no sea efectivo.
Sin embargo, los partidos de la oposición de derecha, que en otras ocasiones han modificado fechas de elecciones, se oponen a esta modificación bajo el supuesto de que ello daría tiempo al ”chavismo” a recomponer fuerzas después de la derrota del referéndum.
La nueva ley de Procesos Electorales que sustituiría a la vigente ley Orgánica de Sufragio y Participación Política, podría ser sancionada antes de noviembre y ello, según la interpretación de la Asamblea Nacional, determinaría el aplazamiento de los comicios para alcaldes, concejales y juntas parroquiales para agosto del próximo año.
Estas modificaciones también podrían acortar el mandato de algunos gobernantes locales y extender otros que caducan este año, y se elimina el voto cruzado, al obligar a los partidos a presentar los mismos candidatos por lista que nominalmente.
Gerardo Blyde, líder del opositor partido Nuevo Tiempo, subrayó que la separación de las elecciones regionales, ”permite al chavismo recomponerse”. El dirigente opositor ignoró mencionar el avance que esa separación permite en el proceso de democratización y descentralización, al liberar a los votantes de la fidelidad con el líder nacional.
Es más probable que los votantes ”chavistas” se atrevan a votar fuera de la coalición de gobierno a nivel comunal cuando consideran que no ponen en riesgo al gobierno de su líder, y también en sentido inverso.
”Cualquier retraso le conviene al gobierno, políticamente hablando, porque viene de una derrota electoral fuerte y necesita recomponerse, además hay fracturas dentro del liderazgo chavista” dijo Blyde al diario ”Ultimas Noticias”.
Casualmente, el director de dicho diario, Eleazar Díaz Rangel, recordó que en 1998 los dos principales partido de entonces, COPEI y Acción Democrática, se pusieron de acuerdo para adelantar las elecciones a gobernadores, ante el temor de que Hugo Chávez, entonces candidato presidencial para las elecciones de 1999, arrasara a todo nivel.
Con esa maniobra, los dos partidos que tradicionalmente han gobernado Venezuela, lograron retener algunas gobernaciones y construir feudos opositores al gobierno de Chávez.
Sin embargo, la oposición al gobierno no tiene memoria ni busca la conveniencia de los ciudadanos. El mismo Blyde se contradice cuando sostiene que la situación del país ”no va a acercar al pueblo a las opciones chavistas”.
Mientras tanto, dirigentes del Movimiento al Socialismo (MAS) que en alguna etapa anterior de su historia hizo honor a su nombre pero que hoy está volcado a trabajar con la burguesía más rancia de Venezuela, rechazan también la modificación de la ley electoral al considerarla una medida ”anticonstitucional” porque extiende o acorta mandatos ya establecidos. Así lo manifestó el coordinador de esa agrupación que esta semana cumplió 37 años José Antonio España.
Acción Democrática, en tanto adelantó que recién la próxima semana evaluaran la situación, aunque su presidente, Víctor Bolívar ya consideró el aplazamiento como anticonstitucional.
La oposición teme más que nada no poder presentar frentes comunes en la medida que las elecciones regionales se independicen.
Tras la firma del acuerdo ”unitario” del pasado 23 de enero, la oposición ha lanzado ya precandidatos a gobernadores y alcaldes y un aplazamiento de los comicios podría hacer surgir más candidatos e impedir que las cúpulas puedan acordar los nombres de los postulantes a gobernadores y alcaldes.
La oposición no ha establecido de que manera se designarán los candidatos, y la posibilidad de una elección desde las bases parece remota. Por ahora, la forma que consideran más ”democrática” es la medición de aceptación por encuestas. Un método bastante desacreditado en otros países, ya que la forma en que se realizan las preguntas de las encuestas, las opciones presentadas, y el dinero invertido por los candidatos que las encargan, juegan un papel fundamental para presentar resultados predeterminados.
La oposición sigue de alguna manera presa de su propia trampa cuando se negó a presentar candidatos a las elecciones para la Asamblea Nacional y dejarle la mayoría a las fuerzas chavistas en el órgano legislativo.
Ahora cuenta con los legisladores de ”Podemos” que el pasado año rompió con el gobierno de Hugo Chávez y pasó a ser uno de los grupos más activos de la oposición.
Mientras la oposición reivindique el camino constitucional aunque bajo cuerda no descarte otras opciones como han señalado dirigentes de AD deberá respetar las decisiones de la Asamblea Nacional, y en todo caso, utilizar todo el aparato de propaganda que tiene disponible para impugnar como ”anticonstitucional” cualquier medida del gobierno y abrir paso a otros proyectos de desestabilización y subversión.
Apuros en la coalición de gobierno
Por su parte, la coalición de gobierno también está presentando problemas a la hora de acordar alianzas y candidatos. Hasta ahora la mayor traba está en que el partido de gobierno, el Partido Socialista Unidos de Venezuela (PSUV) está en pleno proceso de formación, y los partidos aliados del gobierno, que no se han integrado al PSUV, quieren lanzar ya sus candidatos o establecer mecanismos comunes de designación.
Hasta ahora el presidente Hugo Chávez ha impedido una carrera por las candidaturas pero los nombres comienzan a surgir de todas maneras.
Manténgase en contacto
Síganos en las redes sociales
Subscribe to weekly newsletter