¿Podrías definirnos el perfil temático de www.buenosairessos.com?

Buenos Aires Sos se creó con la intención de reflejar todo aquello que tenga que ver con nuestra ciudad, ya que los que la hacemos somos todos periodistas porteños, orgullosos de serlo. Intentamos buscar ése reflejo a través de una mirada inquisidora, mostrar lo que no se ve, lo que permanece escondido; y también hacer ver lo que vemos todos los días, pero vemos, no miramos.

Desde abril del 2006, fecha en que nació este portal, seguimos husmeando todo rincón con olor a urbe. La temática de lo urbano es lo que nos une, lo que nos lleva a encontrar esa Buenos Aires tan cotidiana, que a veces nos olvidamos de mimarla. Buenos Aires Sos pretende ser un mimo para nuestra ciudad, redescubrirla con todo el cariño que ponemos en seducirla, coquetearla, en fin… chamuyarla. Porque a ella le conmueven los susurros en los oídos, porque por más que la ensucien los funcionarios de turno, que la vapuleen los delincuentes de guantes blancos y de los otros, ella es la “Reina del Plata”.

¿Quiénes leen el portal?

Como dice un graffiti, que leí por la calle Corrientes:"las chicas buenas van al cielo, las otras a donde ellas quieran", los artículos de buenosairessos.com no sólo son leídos por gente de Buenos Aires, sino también -para sorpresa nuestra- pegó fuerte en países tan distantes como Rusia, China, Japón o Canadá.

¿Cuáles son los temas más requeridos por los lectores y abonados?

La historia de los lugares de nuestra ciudad, en particular la de los bares; tribus y leyendas urbanas, escritores jóvenes y su patrimonio histórico.

¿Por qué creés que los eligen?

El lector que piensa viajar como futuro turista lo lee porque se querrá interiorizar un poco de lo que es. El porteño lo lee porque le gusta conocer sus raíces. Tenemos muchos lectores jóvenes que se fascinan con la historia de los lugares, muchos quedaron asombrados al enterarse, por este medio, que la actual plaza San Martín, allá por las invasiones inglesas había sido una plaza de toros o que el almacén de “Manolito”, personaje de Quino, en Mafalda, existe y está ubicado en San Telmo.

En la última década los sitios y portales han comenzado a afianzarse en la Web, desplazando, lentamente, al papel (diarios, revistas): ¿a qué se lo adjudicás?

Los grandes medios de comunicación actualmente han deschavado sus intenciones, antes lo disimulaban o creían hacerlo, ahora funcionan como partidos políticos, sin plataforma electoral visible pero difunden la cultura o la información de acuerdo a sus intereses económicos.

Ante ello, comienzan a adquirir un nuevo significado los medios alternativos, especialmente aquellos bien elaborados en su estética y contenido, y eso se ve reflejado en la cantidad de sitios distintos en que la gente ahora busca información. Aquella persona con un poquito de avidez ya no lee solamente un multimedio, ahora busca otras voces. Una de ellas es la nuestra.

¿Nos podes decir dónde estudiaste y trabajaste como profesional de la comunicación y qué es hoy para vos tener un medio que llega a miles de personas de distintas partes del mundo mensualmente?

Estudié en la Universidad de Lomas de Zamora, cuando la carrera de Periodismo sólo se dictaba en La Plata y en Lomas; fui docente en “Buenos Aires, Arte y Comunicación”, trabajé en el diario “La Voz”, y durante quince años en el noticiero de “Telefé”.

Después de trabajar durante tanto tiempo en el noticiero de mayor rating de la televisión, después de haber vivido por dentro la cocina de la desinformación, estoy orgullosa de coordinar este portal, que si bien es chico, prioriza la calidad y no la cantidad.

¿No considerás, que al igual que sucede con los monopolios informativos, debe existir una distribución equitativa de la publicidad también para este nuevo tipo de medios y para los comunitarios, locales y regionales?

Claro que sí, la distribución debe ser equitativa, y para los medios chicos es fundamental, ya que también tenemos el mismo derecho que el resto de los medios. Somos miles, que multiplicamos por miles la práctica real del derecho a la información. Creo que sería conveniente que se contemple en las nuevas leyes ligadas a la comunicación una verdadera y equitativa distribución de las pautas publicitarias. No debe existir exclusión comunicacional y al mismo tiempo se debe proteger los puestos de trabajo de nuestros espacios y, como ya sucede en algunos municipios, ser considerados de “Interés comunitario”.

Sebastián Bramante