Afrontando increíbles adversidades climáticas, distintas especies de varios lugares del planeta se dieron cita en la Convención de Aves, organizada por el Cóndor Andino, en Pajarilandia, el paraíso de las aves, con el propósito de analizar el cambio del clima, sus bajas y altas temperaturas imprevistas y el porqué de esos cambios bruscos. Este problema les ha confundido tanto que ya no saben ni cuándo es el tiempo de apareamiento. Esperan que cambie la manera de vivir del humano, que prime el respeto a la vida y a la madre tierra; y mantienen la esperanza de que el único ser vivo que puede ayudar a mejorar su situación llegue al evento: el Ave Fénix.

Pajarilandia es una obra de teatro que montaron cerca 50 personas, entre músicos y actores, acompañados de melodías andinas. Se presentó en las tablas del Teatro Sucre de la capital, del 17 al 20 de junio, llegando con un mensaje claro y motivador a niños y adultos. Samay Benítez, de 4 años, luego de la obra comprendió que: “los pajaritos no tienen árboles para vivir, no tienen qué comer y a todos los animales se debe cuidar”.

Michelle Gómez Rodríguez, colombiana y conocida locutora de una estación local, ha hecho teatro también en su patria natal, y en el año 93 fue un sueño lo que le inspiró la creación de esta obra, de la que es su guionista y productora. Manifiesta también: “estamos conscientes del daño que está sufriendo el planeta, pero somos inconscientes al no hacer algo por cambiar”. Espera que el mensaje no sea solo recibido, sino que se vea un cambio de actitud en la sociedad, sobre todo en los jóvenes.

Para la ejecución de su sueño, la actriz debió realizar varias investigaciones sobre las aves, su comportamiento, el peligro que corren varias especies que están en peligro de extinción, y la conexión que tienen con todas las cosas de la naturaleza.

Hector Simbaña, coordinador de Canto Vivo, conjunto musical que acompañó a la obra, comenta que su grupo siempre ha trabajado junto con los sectores organizados a nivel nacional, y esto los ha llevado a encontrarse con grupos ambientalistas y de otros géneros.

“El mensaje del grupo musical no está alejado del mensaje del grupo de teatreros y del mensaje ambiental. Desde este ámbito actuamos y cantamos para decir lo que está ocurriendo en el mundo, proyectándonos en los niños, jóvenes y adultos. Esta oportunidad nos pareció un proyecto maravilloso, la fusión de nuestra música, el tema y los artistas de renombre que participan en la obra”. El músico cree que el hombre debe solucionar este problema en unidad, solo así se salvarán la naturaleza y la sociedad misma, la cual también requiere transformarse.

Amparo Sigcha