La divulgación de información en temas ambientales se ha convertido, afortunadamente, en una tendencia que ha incrementando la atención de la gente respecto de las amenazas que enfrenta el medio ambiente y, en consecuencia, los seres humanos. Pero más afortunado es observar que cada día son más personas las que se ocupan de emprender acciones que contrarresten los daños que está sufriendo el planeta. Es así que, quizá sin saberlo, comenzamos a restaurar también nuestra amistad, convivencia, crecimiento y desarrollo armónico entre la sociedad y el medio ambiente.
La familia Pronatura quiere que recuerdes algo: Antes de que en los noticiaros vieras ese reportaje acerca de los incendios forestales, la nota sobre las inundaciones en Chiapas, las consecuencias del cambio climático, entre otras catástrofes naturales que aquejan al país, aquéllas por la cuales decidiste informarte y participar en el cuidado de la naturaleza, antes de todo eso, ¿estás seguro de que no sabías nada sobre el medio ambiente?
Queremos que recuerdes a un viejo amigo, aquél que solías visitar para ver cómo estaba, que era tan grande que en cada visita era diferente, te gustaba por las múltiples caras que tenía, desde esas vistas soleadas, hasta esas texturas arenosas que tocaban tu piel, o aquel aroma verde que podías percibir.
Esa riqueza biológica que solías conocer, pero, especialmente, con quien solías convivir más a menudo, ahora ha sido olvidada y pocas personas la visitan para saber cómo se encuentra, cómo pueden ayudarla y hacen algo por hacerla sentir mejor. Muy probablemente seas una de esas personas que olvidó a su amigo el medio ambiente. Nosotros te preguntamos, ¿por qué te has alejado?
Esa belleza por la que amabas conocerlo, abundante en especies de flora y fauna, con una gran diversidad de ecosistemas que coexisten y hacen brillar a México entre los países más ricos en biodiversidad a nivel mundial, han quedado hoy olvidados. Ahora el reconocimiento hacia nuestro país se debe, en gran medida, al deterioro ambiental que padece, y te preguntamos de nuevo, ¿cómo ayudaste a ese viejo amigo a salir adelante?
Hubo una época en que la convivencia con el entorno se daba, paradójicamente, de manera natural: el hombre estaba en contacto con la naturaleza, en estrecha relación, pero a medida que se fue socializando y teniendo nuevas necesidades de cobijo, puntos estratégicos y determinados para reunirse, etcétera, propició que los espacios donde la vida se llevaba a cabo se convirtieran en los sitios de esparcimiento y de una manera rústica se crearan los primeros espacios naturales protegidos para estos fines.
Incluso, en su tiempo, Moctezuma Xocoyotzin favoreció el establecimiento y mantenimiento de jardines en Anáhuac. Si bien en la época de la Colonia no se realizaron muchos esfuerzos de conservación, fue hasta 1876 que se decretó al Parque Nacional Desierto de los Leones como la primera reserva nacional.
Actualmente, existen las áreas naturales protegidas: espacios donde se trata de proteger la mayor riqueza natural biológica. Algunas de las especies que habitan en éstas son incluso endémicas, es decir que no existen en ninguna otra parte del mundo.
¿Qué fue lo que pasó? ¿Acaso estas áreas de conservación fueron creadas para alejarte del ambiente e impedir cualquier contacto entre tú y éstas? Para nada, Pronatura te asegura que no es así. Los objetivos de las áreas naturales protegidas son la conservación de la diversidad biológica para poder ofrecer bienes y servicios que se derivan de los recursos naturales ¡como el oxígeno! Así es, recuerda que los árboles, por ejemplo, además de absorber el bióxido de carbono que generas (uno de los principales gases que contribuyen al cambio climático) lo transformela en el oxígeno que respiras.
Claro que es necesario cuidar estas áreas de muchas amenazas y elementos que las ponen en peligro, pero eso no te debe hacer sentir como un agente externo que puede agredir o dañar el medio ambiente. Más allá de buscar responsables, asume el rol que ejerces como parte indispensable y determinante del futuro de los espacios naturales del país, así como del valor, del apoyo, la confianza y el compromiso que puedes sumar a los esfuerzos de las personas, ejidos, comunidades, empresas, organizaciones, autoridades locales, estatales, federales, con quienes compartes la visión de un ambiente sano.
No temas el reencuentro con un amigo que te necesita. Ayúdalo a sanar. Pronatura considera que es un tema que debe ser prioritario para todos y que se ha comprobado que la pérdida de este amigo mutuo empobrece al planeta y reduce su capacidad de sostenernos, tanto en el presente como en el futuro.
Tan sólo en los últimos 50 años hemos transformado los ecosistemas más rápida y extensamente que en ningún otro periodo comparable de la historia humana, con el propósito de atender nuestras demandas de alimento, madera y fibra, entre otras.
Seguramente conocerás muchas alternativas de productos y servicios que son amables con el medio ambiente, y esperamos que las consideres como una de las tantas maneras en las que puedes ayudar; sin embargo, queremos recordarte algo muy importante: no te distancies de las áreas naturales en conservación; no las olvides ni pierdas el contacto con la naturaleza. No sientas que porque hay opciones de tener un espacio verde cerca de ti en tu casa, oficina, escuela y otros sitios, tu alejamiento con el entorno natural es irremediable.
Piensa en convivir de nuevo con la naturaleza. Recuérdala, visítala y no la consideres únicamente como un espacio al que puedes escapar cuando tienes un par de días libres y que podrá enmarcar tu vista con un hermoso paisaje. Queremos que pienses que es más que un recuerdo, que pueden reconocerse y retomar esa amistad.
Las áreas de conservación no son un enemigo que te prohíbe que interactúes con el medio ambiente, es sólo una manera más de ayudarle a permanecer seguro. Tú también harías lo mismo por un amigo, cuidarlo y procurarlo de lo mejor, pero recuerda visitarlo, involucrarte y crecer con él.
Manténgase en contacto
Síganos en las redes sociales
Subscribe to weekly newsletter