El primer ministro iraquí, Nuri al-Maliki, acusó al gobierno autónomo kurdo de dar albergue al cuartel general del Emirato Islámico (ex EIIL o Emirato Islámico en Irak y el Levante). Según el primer ministro iraquí, el cuartel general del actual Emirato Islámico se halla precisamente en Erbil, la capital del Kurdistán iraquí.

El presidente del gobierno autónomo kurdo, Massud Barzani, respondió calificando al primer ministro iraquí de «histérico».

Desde el inicio de junio, el Emirato Islámico y el gobierno autónomo kurdo iniciaron una operación militar planificada [1] y coordinada de forma conjunta.

En el marco de esa operación, el Emirato Islámico conquistó el norte de Irak –donde la población sunnita es mayoritaria– y proclamó allí el Califato mientras que el gobierno autónomo kurdo se apoderó de la región kurda, conquistando incluso la ciudad de la Kirkuk –hasta entonces bajo control del gobierno central iraquí–, incrementando su territorio en un 40% y anunciando la preparación de un referéndum de autodeterminación.