El presidente de la Comisión de Inteligencia de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Devin Nunes (republicano por el Estado de California), confirmó hace 2 semanas que las agencias gubernamentales escucharon «accidentalmente» las comunicaciones de varios miembros del equipo de campaña de Donald Trump.
La reacción inmediata del Partido Demócrata fue comenzar a movilizar representantes republicanos para tratar de sacar a Devin Nunes de la presidencia de la Comisión de Inteligencia.
Sin embargo, según dijo el ex fiscal Joseph diGenova en entrevista concedida al Daily Caller, los nombres de las personas cuyas comunicaciones estaban siendo interceptadas por orden de la administración Obama estaban censurados en el informe que entregó Susan Rice –la consejera de seguridad de Obama– a la mencionada comisión de Inteligencia.
Según lo que han publicado Bloomberg y Fox News, resulta que la administración Obama si espió deliberadamente a Donald Trump, y a su equipo de campaña.
No sólo Susan Rice sino también su adjunto, Ben Rhodes –el redactor del informe de la comisión investigadora de la administración Bush sobre el 11 de septiembre–, el director de la CIA John Brennan y el director nacional de inteligencia James Clapper aparecen como organizadores del complot.
“Former US Attorney: Susan Rice Ordered Spy Agencies To Produce ‘Detailed Spreadsheets’ Involving Trump”, Richard Pollock, The Daily Caller, 4 de abril de 2017.
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