Crisis política y económica quiebra confianza

La crisis política por la corrupción retraerá la confianza del inversionista el 2018, cabe destacar que dicho factor es el pilar de la economía, y si se pierde, una caída de la inversión mediana, pequeña y consumo es inevitable, lo que genera menores ingresos por ventas a la actividad empresarial y para el crecimiento de la actividad económica e impide que el Estado recaude tributos y se promueve la evasión tributaria afectando la caja fiscal.

Puedo afirmar sin temor, que la confianza es el fundamento de los éxitos y fracasos económicos de un país como el nuestro que tiene la apariencia de crecimiento del PBI para el 2018 por el aumento de inversiones en minería y mejores precios de los minerales que exportamos. Pero internamente ¿qué hacemos, aceptar autoridades que no saben gobernar y tecnócratas que dan recetas que no funcionan, pero son bien pagadas en las consultorías que realizan o están ubicados en puestos burocráticos y dan vueltas en la estructura de Poder de cada gobierno?

Se olvidan que según la universidad del siglo XXI lo práctico deja de ser conocimiento y se convierte en sabiduría. Tenemos al conocimiento práctico: habilidad para motivar, escuchar de manera activa, relacionarse bien con otros, manejar conflictos, o sea aprender y manejar lecciones de la experiencia. Alvin Toffler decía que el “conocimiento es la fuente más democrática de poder”. Cuando hay confianza, crece la inversión, se hace negocios, planes de mediano y largo plazo, se consume, todo es bienestar.

Cuando no hay confianza en la economía, cae la inversión o el gasto de las familias, los medianos inversionistas quieren salir desesperadamente de ella, lo que puede causar inestabilidad y la caída bursátil en Lima, incrementando el riesgo país. El déficit fiscal de 3% se debe disminuir para el 2018 con mayores ingresos tributarios fruto del crecimiento del PBI que debe ser 4%.

No se trata de opinar con pesimismo pero hay quienes debemos decir la verdad de lo que puede pasar en la economía con un panorama incierto, algo que no se hace en beneficio de los futuros jubilados, es que sus ahorros trabajados por el oligopolio de las AFP´s son libres y controlados por 4 AFPs que manejan el 21% de nuestro PBI S/. 137,000 millones por leyes del Congreso, reestructurar la SUNAT para facilitar la recaudación tributaria, recordemos que el 60% de nuestra economía es informal.

Nuestro problema es el carácter inestable del crecimiento que con este impase político será mayor.

Germán Lench Cáceres