Venezuela se fija la meta de armar, junto con algunas naciones de esa región, compañías de comercio y suministro de combustibles, con el objetivo de reducir los costos de la energía.
E1 alto impacto que deben enfrentar las naciones de América Central y el Caribe cada vez que se incrementan los precios del barril petrolero y sus derivados, después de todo, arroja noticias positivas. Por 1o menos para los estados.
El Ejecutivo ha decidido promover -sustentado en las experiencias de los programas que se realizan bajo el marco del Acuerdo de San José y el Acuerdo Energético de Caracas- la creación de un nuevo actor regional, Petrocaribe.
Según el ministro de Energía y Minas, Rafael Ramírez, "se trata de una propuesta integral que tiene la finalidad de lograr que se estructuren organizaciones de suministro de petróleo y combustibles en conjunto con las compañías nacionales existentes en los países de la zona". Y donde estas empresas no existan, la idea es ayudar a conformarlas para pasar a concretar una figura que pueda coordinar todos estos esfuerzos. Es decir, tal y como expresa el funcionario citado: “Venezuela y estas naciones vamos a asumir en conjunto actividades de intermediación.”
La mayoría de los países del Caribe están en manos de los intermediarios o traders, figuras comerciales que -de acuerdo con los analistas- hacen importantes ganancias producto de la especulación con los países más pequeños.
La meta oficial es llegar a la conformación de una empresa de transpone y comercialización, amén de la firma de acuerdos para la refinación conjunta de crudo, en los países donde exista esa capacidad.
Y todas esas decisiones que tendrían como propósito asegurar mercados -a la vez que se abaratan los costos de la energia en la zona- estarán acompañadas de la posibilidad de hacer realidad proyectos de infraestructura para el sector petrolero y gas en las naciones beneficiadas, con apoyo del venezolano Banco de Desarrollo Económico y Social (Bandes) y con la participación activa de las empresas nacionales de bienes y servicios.
A propósito de estos planes, funcionarios de Citgo Petroleum Corporation han sostenido que Pdvsa debería trazarse una estrategia para hacerse de nuevos activos en la región, porque actualmente no existe la plena capacidad para abastecer a los clientes solamente con crudo venezolano.
Venezuela, por intermedio de Citgo, posee 14 mil estaciones de servicio en Estados Unidos a las cuales esta filial está obligada a suministrarles productos. Pero la capacidad de refinación instalada no es suficiente para abastecer a todos sus clientes.
Eso significa que a diario debe comprar casi 58% de sus productos limpios en el mercado de ocasión para poder honrar estas obligaciones.
Mediante la campaña de expansión de las marcas PDV y Citgo en América Latina y el Caribe, ya han sido abanderadas cetra de 82 estaciones de servicio distribuidas de la siguiente manera: 32 en Brasil, 58 en Puerto Rico y 12 en Guatemala. No obstante, aún se espera por la entrada en los mercados de gasolina al detal de México, Ecuador, Argentina, Panamá y Chile, para 2004 se proyectan inversiones en la región por aproximadamente 12 millones de dólares.
Citgo registró ganancias netas superiores a los 600 millones de dólares en el 2003. Esta empresa opera las refinerías de Lake Charles en Louisiana; Corpus Christi en Texas; y Lemont en Illinois; y las plantas de asfalto en Paulsboro, Nueva Jersey, y Savannah, en Georgia. Posee además una participación de 41% en Lyondell-Citgo Refining LP, instalación de combustible de capital mixto en Houston, Texas.
En total posee una capacidad de procesamiento de crudos de aproximadamente 865 mil barriles diarios. Sus productos (básicamente gasolina ecológica) son colocados entre unos 800 mayoristas. Es uno de los cinco proveedores de carburantes más importantes en Estados Unidos y el principal productor de asfalto de la costa este de ese país.
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