Venezuela expulsará a la misión evangélica estadounidense Nuevas Tribus, que actúa desde 1946 en comunidades indígenas del sur fronterizo con Colombia y Brasil, anunció el presidente Hugo Chávez.
"Se van de Venezuela. Son agentes de una verdadera penetración imperialista. Se llevan información sensible y están explotando a los indios. Así que se van, y me importan un bledo las consecuencias que esto pueda traer", dijo el mandatario.
Las Nuevas Tribus, una organización evangelista asociada durante décadas al estadounidense Instituto Lingüístico de Verano, ha actuado en varios países de Asia y América Latina, y en Venezuela se concentró en las etnias indígenas yanomami, ye’kuana, panare y otras del sur del país.
El Instituto Lingüístico de Verano fue fundado en 1934 con el declarado propósito de traducir la Biblia a lenguas autóctonas.
Chávez se encontraba en las llanuras del sur para entregar títulos de propiedad sobre tierras comunales, motores para lanchas, vehículos y créditos a comunidades indígenas en esta fecha que declaró "día de la resistencia indígena", cuando efectuó el sorpresivo anuncio, transmitido por cadena de radio y televisión.
"Me importan un bledo las consecuencias internacionales que esta decisión pueda tener. Aquí está el alto mando militar, como muestra de nuestra decisión de ser libres o morir. He visto informes y vídeos de la actividad de estas Nuevas Tribus. No las queremos, aquí todos somos de una tribu vieja", dijo el presidente.
Desde los años 70, las Nuevas Tribus han sido acusadas de efectuar prospección de minerales estratégicos y de forzar a los indígenas a la aculturación y la evangelización. Las acusaciones partieron de organizaciones políticas de izquierda, ambientalistas, grupos indígenas, intelectuales, prelados católicos y algunos mandos militares.
El sociólogo y ambientalista Alexander Luzardo, quien publicó 20 años atrás la investigación "Amazonas, el negocio de este mundo. El caso Nuevas Tribus", saludó de inmediato la iniciativa y dijo a IPS que así se "cumple lo estipulado en la Constitución y numerosos informes gubernamentales y parlamentarios".
La Constitución de 1999, recordó Luzardo, establece la autodeterminación de los pueblos indígenas y el respeto y cuidado de sus creencias, valores y costumbres.
"Las Nuevas Tribus han impulsado la vergüenza entre los indígenas, su occidentalización compulsiva, y la culpabilización disfrazada de Evangelio: a los panares se les enseñaba que Satanás se volvió panare y que ellos eran culpables de la crucifixión de Jesús", dijo Luzardo.
Richard Bruce, un misionero de las Nuevas Tribus, dijo en una entrevista con la prensa local cuatro años atrás que "queremos respetar la manera de vivir de los indígenas y sus costumbres, no cambiarlas de golpe. Esto no es un pedazo de Estados Unidos".
En sus momentos de mayor actividad, un par de décadas atrás, los misioneros estadounidenses de las Nuevas Tribus llegaron a ser casi 200, según Luzardo. Su principal concentración fue en Tama-Tama, un área de confluencia de ríos en el corazón del estado de Amazonas, el extremo sur del país.
Se supone que esa zona es rica en minerales como uranio. Durante muchos años las Nuevas Tribus operaron allí pistas aéreas e instalaciones cuya modernidad contrastaba con las construcciones elementales de las comunidades indígenas que atendían.
El desaparecido Movimiento de Identidad Nacional, que reunió a grupos culturales, ambientalistas e indigenistas en los años 80, sostenía que las Nuevas Tribus actuaban como fachada para la prospección de riqueza geológica y mineral de interés para financistas del Instituto Lingüístico de Verano, como las corporaciones General Dynamics, que actúa en la industria bélica, y Ford.
Sin embargo, los reclamos de expulsión de las Nuevas Tribus habían caído en el olvido "así como la actividad de ese grupo, que además presentó divisiones en los últimos años", de acuerdo con Luzardo.
Pero este miércoles, Chávez dijo que "mientras los indígenas viven en condiciones muy duras, las Nuevas Tribus poseen plantas eléctricas, sistemas de radio y pistas bien mantenidas con tractores y podadoras, donde vienen aviones del exterior sin pasar por aduana alguna".
Son "verdaderas penetraciones imperialistas, la CIA (Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos), las verdaderas nuevas tribus que se llevan información sensible, información estratégica y explotan a los indios, aquí en nuestra propia casa", añadió.
La mención a las consecuencias de su medida estaría asociada a que las Nuevas Tribus pertenecen al Consejo Evangélico de Venezuela y podrían aducir persecución religiosa por parte del gobierno.
Pero también son una organización basada en Estados Unidos, con cuyo gobierno el de Venezuela sostiene un creciente enfrentamiento político y diplomático desde hace dos años.
Por añadidura, el telepredicador evangelista estadounidense Pat Robertson pidió en agosto públicamente la eliminación del gobernante venezolano, y luego lo acusó de financiar actividades de la red terrorista islámica Al Qaeda.
Chávez sostuvo que "no vamos a atropellar a nadie y les daremos un plazo a las Nuevas Tribus para que recojan sus “macundales” (enseres) y se vayan".
Aunque la medida es positiva, "hoy mismo hay nuevas protestas indígenas, porque Chávez está abriendo tierras indígenas a la explotación del carbón (en el noroeste del país) a otras “nuevas tribus”, esta vez brasileñas", dijo Luzardo, en alusión a la sociedad entre empresas de Venezuela y Brasil para explotar ese recurso a partir del año próximo.
IPS
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