Esta muy bien que las autoridades se preocupen en formular las posibilidades de la creación de un tratado de libre comercio entre los países que conformamos la costa del Pacífico Sur de América y aún mejor si además incluyera a México y los países Centroamericanos con costa al Océano Pacífico. También esta muy bien que nos preocupemos por llevar adelante la negociación por un tratado de libre comercio con la Unión Europea a través de la Comunidad Andina de Naciones. Nadie en un razonamiento lógico puede oponerse a ello, por el contrario hay que apoyarlo. Evidentemente eso nos lleva a una inmediata pregunta en voz alta, ¿es eso prioritario?, cuando evidentemente ello implica una serie de negociaciones en las cuales el Perú por si sólo no puede decidir sino que tiene que buscar un consenso con otras naciones. Esto implicará negociaciones de largo aliento, no es cuestión de corto plazo, pues primero deberemos armonizar nuestras propias políticas para poder tener un frente común de negociación.
Por el contrario y tal como lo venimos pregonando en esta columna, desde el primer día de su aparición, requerimos que identifiquemos claramente nuestras posibilidades y perspectivas y así determinar nuestras prioridades factibles de ser alcanzadas en un plazo real, corto y eficaz. Consideramos muy seriamente que nuestro principal objetivo en estos momentos es el mercado asiático y es hacia el mismo que debemos llevar a cabo todos nuestros esfuerzos. Esa es la razón de las carreteras interoceánicas y el o los megapuertos. Esfuerzo que se debe llevar adelante mientras se llevan a cabo las negociaciones para los otros TLC que están en la agenda y que tienen un plazo de conclusión mucho más largo. No podemos esperar a que otros nos ganen en la plaza asiática por puesta de mano. Para esta negociación no necesitamos coordinar con ningún otro país lo que podemos hacer solos. El tiempo corre en nuestra contra.
Aquí proponemos la creación de la Fundación Perú que deberá estar abocada a la identificación de nuestras potencialidades así como nuestras debilidades para poder obtener un mejor resultado en nuestra negociación con el mercado asiático y mundial. Esta institución deberá estar conformada por todos los gremios productores privados del país –exportadores, industriales, pequeña y mediana industria, etc- por las entidades gubernamentales que les compete la temática, por las Universidades más prestigiosas de la nación y la representación de los Colegios profesionales. La misma deberá tener como una de sus principales acciones el levantamiento de un mapa de nuestras posibilidades actuales y futuras. Otorgar una coherencia funcional a nuestras expectativas y convertirse en un aporte nacional a esta futura negociación.
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