CORREO 16/2/08

El fenómeno electoral de Barack Obama se ha convertido en un verdadero tsunami en las primarias del Partido Demócrata americano. El vértice del “Si podemos” tiene realmente una fuerza avasalladora. Su mensaje totalmente renovador es una esperanza para la gran clase media norteamericana, especialmente en lo que se refiere a la nueva concepción de la seguridad social al alcance de todos los ciudadanos, la generación de nuevos empleos en base al desarrollo de la llamada tecnología intermedia, entre otras cosas hacen de que su predicamento político no pueda ser combatido por las otras fuerzas. Como lo mencionamos en esta columna el día en que lanzo su discurso de presentación de Kerry fue cuando Obama puso al descubierto sus potencialidades. Es decir se proyecta como un político de nuevo cuño en la democracia americana. Evidentemente es aún prematuro aventurar que sea el ganador de la elección final. Lo que si parece es que si ganara la elección partidaria para la postulación pues la Senadora Clinton tendría no solamente que ganar en todos los Estados que faltan sino también sus delegados cosa que ya parece no tan factible. Claro que los independientes todavía no se han manifestado y ellos representan casi un 25% del electorado y normalmente siempre han sido conservadores. Para tener una idea de los sentimientos que transcurren entre la juventud americana trascribimos un correo que recibimos de una joven ciudadana. “Como me hubiera gustado estar en el Madison. Acabo de ver y escuchar el magnífico discurso de Obama. Que candidato de lujo que tienen los demócratas. Cuanto más lo escucho y lo veo, más me gusta. I love Obama!!!! Que tal multitud en ese estadio de Madison, habían miles de miles de miles. Que contraste con el discurso, pero con imagen pequeña de Mc Cain. La súper imagen de Obama en el Madison opacaba a un honesto y bien intencionado Mc Cain. Me encantó escuchar que Obama casi emplazo en vivo a Mc Cain a un debate. "Ud nunca podrá decir que yo apoye la guerra en Irak, porque me opuse a ella desde el principio, le dijo Obama a Mc Cain después de felicitarlo por su desempeño en las primarias de hoy. Obama le agradeció por su heroico servicio a la nación, "nos sentimos orgullosos", agregó Obama. Con eso arrancó aplausos de todos en la audiencia, negros, blancos, latinos y demás colores. Fue buenísimo que Obama con tono de virtual candidato demócrata, le hablará a Mc Cain el virtual candidato republicano. Esa dinámica fue muy buena para Obama, un tipo abierto a la globalización social. Hoy lo escuché hablar de la necesidad de hablar otros idiomas en EEUU, de rol social de los jóvenes estadounidenses, que desde mi punto de vista se han mantenido muy indiferentes a todo. Lo de Washington DC no fue sorpresa para los demócratas. La Victoria de Obama ya estaba cantada aquí teniendo en cuenta la composición demográfica: blancos educados/ afro americanos trabajadores. Uno de cada 5 washingtonianos salió a votar. La NPR dicen 100,000 personas. Lo interesante fue Virginia. Obama ganó entre los sectores: blancos A y blancos C, este último es blancos clase trabajadora, uno de los grupos que supuestamente estaba con la Senadora Clinton. Pues no fue así. Si ese ejemplo se repite en otros Estados conservadores. Obama se la lleva sin problema. Obama además en Virginia, le robó a la Clinton el voto latino, que es menor en números comparado con CA, NY o NJ. Pero cómo cada voto cuenta, este contó. A Clinton sólo le queda ganar en los 18 procesos que vienen. Sobre todo en los próximos Ohio y Texas. Wiscosin ya lo perdió, eso que claro esta noche con esa muchedumbre vitoreando con Obama "Yes we can". Otro hecho interesante, la prensa gringa considera a Wisconsin un estado de clase trabajadora. Yo pienso que de no ser por Obama, Wisconsin hubiera estado con Hilary, pero prefirió voltearse y abrazar a Obama. Las matemáticas no han terminado. Y todavía Obama no puede cantar victoria total, sin embargo la balanza se inclina a su favor, con "el momentum" que está gozando. Mc Cain ya ganó prácticamente su nominación, bien por él, la historia le hace justicia frente al 2000 pasado. En todo caso parece en EEUU hay una nueva generación de votantes y hay un inmenso deseo de restaurar el daño que Bush le ha causado a los estadounidenses”.

Gabriel García Pike