¿Reconoce Líbano el fin de la guerra en Siria?

El presidente de la República Libanesa, Michel Aoun, tuvo al parecer una conversación telefónica con el presidente de la República Árabe Siria, Bachar al-Assad. Desde el inicio del conflicto en Siria, sólo el presidente ruso, Vladimir Putin, y su homólogo de Osetia del Sur, Anatoli Bibilov, habían tenido ese tipo de contacto oficial con el presidente sirio.

La mayoría de los países del mundo consideran el conflicto en Siria como una «guerra civil» mientras que Rusia y Osetia del Sur estiman que es una agresión extranjera en la que los agresores utilizaron a los yihadistas.

En julio de 2012, los diferentes partidos libaneses concluyeron la «Declaración de Baabda» [1] donde se comprometían a no permitir que las instituciones libanesas participaran en el conflicto desatado en Siria.

Pero los partidos firmantes de la Declaración sí se implicaron en el conflicto. El primero en hacerlo fue la Corriente del Futuro –el partido del actual primer ministro Hariri–, poniéndose del lado de los yihadistas. Mucho más tarde el Hezbollah acabó por intervenir del lado del gobierno sirio.

Por su parte, el presidente libanés Michel Aoun estima que la política de «distanciamiento» ya no tiene razón de ser desde que los presidentes de Rusia y Estados Unidos realizaron su encuentro cumbre en Helsinki. El presidente libanés estaría por tanto en posición de reconocer la victoria del presidente Assad y de negociar directamente con este último el regreso de los refugiados sirios presentes en Líbano así como la normalización de las relaciones sirio-libanesas.

Por el contrario, otros líderes políticos libaneses, que consideran la presencia de Donald Trump en la Casa Blanca como un accidente efímero y niegan la importancia de la cumbre de Helsinki, pretenden mantener en vigor la Declaración de Baabda, concebida por el entonces presidente estadounidense Barack Obama y su secretaria de Estado Hillary Clinton en vísperas de la primera conferencia de Ginebra sobre la crisis en Siria.