Un pacto potente

Son casi las diez de la noche de un viernes. Dos dirigentes de los feriantes de la población La Victoria se pasean nerviosos por el pasillo de la modesta casa donde funciona el canal comunal "La Señal 3", de La Victoria. Esperan su turno para participar en el noticiero central y como es habitual, ingresan a la sala de control para ver el desarrollo de las noticias. Uno de ellos, mira fijamente la pantalla del monitor y exclama: "Primera vez que veo a Cabieses en la tele". El otro feriano, con el rostro inundado de risa, responde: "Es que estamos en La Victoria, pues compañero".

Paralelamente, en una pequeña sala contigua que cumple la función de estudio, los conductores del noticiero, Luis Lillo, más conocido como "El Polo" y Nibaldo Morales concluyen una interesante entrevista al director de Punto Final, Manuel Cabieses, que se extendió por más de 50 minutos. Fue una conversación franca, fraterna y amistosa, donde el entrevistado se refirió a variados temas de la contingencia nacional e internacional, la lucha clandestina contra la dictadura de Pinochet y los 40 años de Punto Final, entre otros tópicos.

Polo y Nibaldo hicieron gala de un profesionalismo cada vez más escaso en la prensa oficial. La puntualidad, el manejo de los temas y el conocimiento del entrevistado generaron las condiciones para una comunicación profunda, en la que Cabieses relató aspectos íntimos de su experiencia en dictadura. "Permanecimos con mi mujer nueve años clandestinos en Chile. Uno de los momentos más duros fue no poder ver a mi madre antes de morir. En la clandestinidad vivíamos relativamente cerca de su casa", confidenció.

Lucha de ideas

Un aspecto tocado fue el de la precariedad de la democracia post dictadura, que ha tendido a legitimar un modelo que beneficia a la minoría y excluye a la mayoría del país. Conductores y entrevistado coincidieron en la necesidad de construir una alternativa al neoliberalismo desregulado que impulsan tanto la derecha como la Concertación. En ese contexto, Cabieses destacó el éxito del seminario internacional "El Socialismo del Siglo XXI", organizado recientemente por Punto Final. La gran cantidad de personas, principalmente jóvenes, que participaron en ese encuentro, constituye un claro mensaje: el pueblo necesita construir un camino distinto y ese proceso de construcción apunta claramente hacia el socialismo, opinó.

En ese ámbito, destacaron el actual proceso de integración latinoamericana impulsado por Cuba y Venezuela, a través de iniciativas estratégicas tan relevantes como la Alternativa Bolivariana para las Américas (Alba) y TeleSur.
Respecto del rol de los medios de comunicación en Chile, el diagnóstico fue claro y compartido: son decisivos en la producción y reproducción del modelo dominante. Existe un discurso único, a través del cual la prensa genera realidad. Esta monotonía autorreferente sólo es rota por medios alternativos como Punto Final y "La Señal 3" de La Victoria, entre otros, cuya sobrevivencia constituye a estas alturas un verdadero milagro. Por ello, concordaron en la necesidad de aunar esfuerzos y coordinar el trabajo. Y como no hay tiempo que perder, Lillo, Morales y Cabieses asumieron un compromiso en pantalla: trabajar de manera conjunta y permanente para desarrollar y potenciar un periodismo comprometido con la construcción de una alternativa al actual modelo neoliberal.

Finalmente, llegó la hora de la despedida, que no fue un adiós sino un simple hasta luego. Fue un hermoso encuentro entre dos generaciones de luchadores que desde la trinchera de las comunicaciones concuerdan en algo esencial: la necesidad de hacer del oficio una herramienta de lucha para construir un mundo mejor.