JUEVES EN LA PLAZA, CON LAS MADRES

Marcha del jueves 1º de junio de 2006. Hebe de Bonafini

Esta mañana, mejor dicho, al mediodía, tuvimos la suerte de firmar un convenio con Ciencia y Técnica, con el Ministro de Educación Daniel Filmus y con la Universidad de San Martín, un convenio para digitalizar todos los archivos de las Madres, todo lo que tenemos guardado desde el 30 de abril de 1977, cada cartita, cada papelito, cada Marcha de la Resistencia, todas las actas de todas las discusiones. Todo va a ser digitalizado en la Casa de las Madres porque siempre lo que las Madres hicimos fue no dejarlo salir.

Yo me acuerdo que una vez Mignone y Comte Mac Donald querían llevarlo a Holanda, todo lo que iba pasando, lo que las Madres guardábamos. Y nosotras no quisimos, porque era como si dejáramos que se vayan los hijos, o que los dejábamos en manos a otros. Aún no sabíamos cuánto valor tenía en ese momento. Hemos guardado todo, todo. Desde el 30 de abril del ’77 hasta ahora. Cartitas, papelitos, reuniones, actas de reuniones con las Madres de todo el país, viajes, todos los papelitos de las Marchas de la Resistencia. Cuando algunos cliqueen dentro de cuatro años, porque ese tiempo va a llevar hacerlo –acá hay alguien que se ríe porque buscando papelitos un día encontró uno que hizo ella cuanto tenía quince años-, se van a sorprender. Ese y otros miles DE papelitos están guardados, porque las Madres le dimos mucho valor, tanto al más político o científico de los escritos que nos hicieron, como al papelito que nos traían los pibes en las marchas. Así que hemos firmado el convenio y estamos muy contentas y orgullosas. Se van a construir en el subsuelo de la Casa de las Madres, habitaciones para que el trabajo se haga ahí, porque no queremos que el material salga de la Casa. Esto para nosotras es otro paso, porque siempre había miedo, hubo muchos robos. Cuando vino Menem en 45 días entraron 11 veces, y lo primero que se llevaron fueron todas las fotografías de los milicos, que teníamos en varias carpetas. Algunos que nos decían que nos venían a ayudar se llevaban el original y nos dejaban la fotocopia… Bueno, ha pasado de todo, pero con todo lo guardamos con mucho amor y realmente es un archivo inmenso, enorme. Si tantos organismos van a trabajar cuatro años para digitalizar todo, imagínense lo que hay. Estamos contentas de que nuestra historia y la historia de nuestros hijos queden para la posteridad, para que los jóvenes las utilicen en las universidades, en las escuelas y en los colegios secundarios. Se va a poner para que sea utilizado por todos, ese es el convenio que las Madres firmamos hoy.

Y yo hoy también quería hablarles un poco de la Iglesia, porque siempre me gusta hablar de la Iglesia y del Papa, porque a veces me parece que se deja pasar. Este Papa que se llama Benedicto, que quiere decir “bendito”, o “bendecido”. Qué terrible, entre él que se llama así y lo que ha dicho... Este tipo –le dijo tipo al Papa, y es mucho ya- dijo que había sido miembro de la juventud de Hitler “involuntariamente”. El coraje que tuvo para decir que fue involuntaria su participación, cuando todos sabemos, y hemos visto las fotos del tipo con la mano levantada. Y la pregunta de las Madres es que si fue involuntario ser de Hitler, cómo fue que pasó. ¿Lo llevó encadenado, lo torturó para que fuera?, porque a eso acostumbraba Hitler. Y él aceptó. Y otro de los disparates que dijo este tipo es que –se paró parece frente a Dios- y dijo, “¿por qué no hablaste, por qué no dijiste nada?” Yo no sabía que Dios hablaba, la verdad que no se me pasó por la cabeza. Tampoco me imagino qué voz puede tener Dios, que él pensó que Dios no había hablado. Hitler lo obligó a ser de la juventud, lo obligó después a ser de la aviación, cuando ya era un poquito más grandecito. Y ahí ya no era tan obligado, fue recluta. Todo con Hitler, todo “involuntario”...

No se puede creer, que el tipo sea tan, pero tan descarado. Y salió en todos los medios y ningún medio se lo cuestionó. Yo traje para refrescarme porque hice el editorial del programa de radio la otra noche con este tema, y ahora lo quiero decir en la Plaza, porque como después sale por la famosa internet y todo el mundo se entera al rato, vamos a tener la suerte de que todo el mundo se entere en un rato lo que las Madres dijimos en la Plaza.

Las Madres decimos que nos extraña que los periodistas que escarban todo, estos que están preocupados por si Estela (de Carlotto) y yo nos amigamos y me andan todo el día atrás, nunca le cuestionaron al Papa todas estas cosas que él dijo. Dios no habló, no dijo nada. Qué cosa, no, nadie sabía que Dios hablaba y que estaba acá en la Tierra. Entonces, quiere decir que los curas no hablaron porque Dios no habló… Ahí estaba la explicación de por qué la Iglesia no dijo nada cuando tiraban a nuestros hijos vivos al río y al mar. La Iglesia no habló porque Dios no habló, ahí está la pauta. No les echemos la culpa a los curas, Dios no habló, es esa la historia. Y todos los obispos torturadores, que participaron en los campos, lo hicieron involuntariamente…, los llevaron como a Benedicto a ser de la juventud hitleriana.

Entonces, no digamos que Bergoglio es nazi. Es nazi porque Dios no habló. Y él no pudo hablar tampoco porque Dios no lo escuchó. Entonces, que nos quede en claro: no son tan torturadores y asesinos tantos obispos y curas de este país, sino que a Dios se le ocurrió no hablar y no decir nada.

Vamos a ver si ante tanta guerra, tanta masacre, tanta ignominia y tanta muerte, Dios habla y alguna vez lo podemos escuchar.

Gracias.

Hebe de Bonafini