Jerarcas católicos y grupos conservadores han jugado un papel protagónico en la política argentina, ayer apoyando a gobiernos militares, hoy impulsando iniciativas contra el laicismo y los derechos sexuales.
Jerarcas católicos y grupos conservadores han jugado un papel protagónico en la política argentina, ayer apoyando a gobiernos militares, hoy impulsando iniciativas contra el laicismo y los derechos sexuales.
Ejemplo de ello fue la posición antiaborto asumida por el expresidente Menem, que lo llevó a instituir el Día del Nonato, y a declarar en 1997: "estamos unidos con la Iglesia Católica para defender la vida desde la concepción", actitud por la que fue elogiado y premiado por el Vaticano.
Mucho se ha comentado, asimismo, la intervención que para facilitar esos acercamientos tuvo el obispo argentino, Leonardo Sandri, funcionario de la Santa Sede, luego nuncio en Venezuela y en México, y quien ha pasado a ocupar el importante cargo de sustituto para Asuntos Generales.
Más allá de la época del idilio de Menem-Wojtyla, cabe mencionar la visita a este último, en marzo de 2004, del canciller argentino Rafael Bielsa, quien luego del encuentro dijo: "ratifiqué la postura antiabortista de la Argentina", que de hecho ya en 2000 había confirmado el decreto menemista del Día del Nonato.
Además de la acción directa del Vaticano, las fuerzas católicas conservadoras se articulan mediante organizaciones internacionales y coaliciones que, de acuerdo con los principios de Juan Pablo II, orientan sus acciones en torno a la defensa de la abstinencia sexual.
Una de esas coaliciones es Vida Humana Internacional, VHI, con sede en Miami, a su vez, VHI es rama hispana de la coalición Human Life Internacional, de corte provida y decididamente pro Bush.
La filial argentina de VHI es la Asociación Profamilia, que se define como una organización que "Defiende la vida desde la concepción hasta la muerte natural y la familia como célula fundamental de la sociedad". Su director ejecutivo es el Dr. Oscar Botta, a quien VHI presenta como “un experto en salud pública y en el efecto abortivo de la píldora”. También dirigente de Profamilia ha sido July de Mourniño, quien con el apoyo de Jorge Beroglio, arzobispo de Buenos Aires, ha llevado a cabo actividades con motivo del Día del Nonato. Otro de los dirigentes de ese movimiento provida de Argentina es Jorge Scala, quien es coordinador para el Interior de la Argentina de HLI, y asesor legal del Consejo Latinoamericano por la Vida y al Familia. Es vicepresidenta de Profamilia María Elba A. de Muñiz, y es diputado "provida" Patricia M. Ruiz Moreno de Ceballos, cuya asesora es la mencionada July de Mouriño.
El 25 de marzo de 2001, el evento de Día del Niño por Nacer fue organizado por el Dr. Juan José R. Laprovitta, secretario de Culto de la Presidencia de la Nación, y al mismo acudió también Magaly Llaguno, por parte de VHI. Llaguno ha dirigido VHI y es figura conspicua del exilio cubano radical.
Otra coalición de corte provida que tiene presencia en Argentina es la Red de Centros de Ayuda a la Mujer, que tienen el doble objetivo de fortalecer el activismo provida y de hacer desistir a las mujeres que pretenden abortar, incluso ofreciéndoles ayuda material.
La Organización Mundial del Método de Ovulación Billings, WOOMB, se dedica a la enseñanza del método Billings, pero sus actividades pueden ir de la mano con el activismo de signo provida y con los arriba mencionados Centros de Ayuda a la Mujer. En Argentina opera a través de Woomb Argentina y del grupo Senderos de la Naturaleza.
Otra coalición conservadora típica, que en este caso ha sido impulsada desde México es la Unión Iberoamericana de Padres de Familia (UNIAPA), cuya representación en Argentina es la Confederación de Uniones de Padres de Familia, CUPFRA, fundada en 1948 y dependiente directamente de la Conferencia Episcopal Argentina. CUPFRA tiene como uno de sus principales objetivos la “defensa de los principios y derechos de la Educación y la Familia de acuerdo con las normas, doctrinas y directivas de la Iglesia Católica”, así como establecer relaciones con organizaciones similares de otros países.
Un grupo provida internacional que actúa en Argentina es la Alianza Latinoamericana para la Familia, ALAFA, fundada en Caracas por Cristina de Marcellus de Vollmer, esposa del empresario licorero Alberto Vollmer Herrera. En marzo de 2003, ALAFA de Argentina fue una de las organizaciones autoidentificadas como “defensoras de la familia” que denunciaron el “peligro que constituye para los menores de edad un convenio que firmó el gobierno de Buenos Aires... con la sociedad Gay-Lésbica (SIGLA) para que le enseñe a niños y adolescentes cómo alcanzar una “sexualidad plena”.
El Opus Dei, polémico grupo de filiación conservadora, opera en Argentina desde 1950. En su libro Opus Dei. El totalitarismo católico, Emilio J.Corbiere afirma que en Argentina el Opus Dei inició sus “montando desde ese momento colegios e institutos terciarios hasta llegar a la actual Universidad Austral” (creada en 1990)...”De acuerdo con Corbiere dicho grupo se consolidó durante la dictadura militar de Juan Carlos Onganía, al colocar a varios de sus cuadros en el área de Educación, como el profesor Marcos Ronchino, quien había sido director de la Editorial Magisterio del Río de la Plata; “Otro opusdeísta fue el Dr. José Mariano Astigueta, colaborador del onganiato e impulsor de una frustrada “reforma educativa” reaccionaria.
En el gobierno de Frondizi, asegura, “actuó el opusdeísta Mario Amadeo, antiguo nacionalista católico que había formado parte del grupo y la revista Sol y Luna. Posteriormente lo hizo en el Ateneo de la República, que reunió a viejos nacionalistas católicos que apoyaron la dictadura de Onganía. Entre ellos estaba el opusdeísta Nicanor Costa Méndez, inefable ministro de las dictaduras de Onganía y del general Leopoldo Fortunato Galtieri”.
En tiempos del general Jorge Rafael Videla, “integrantes de la Prelatura inspiraron el FORES (Foro para la Reforma Judicial), que reunía a abogados amigos del régimen militar. Pero la consolidación opusdeísta se produjo durante la década del menemismo”. Como impulsores del mismo y a la vez de la Obra menciona a Aldo Carreras y Antonio Boggiano....”.
Por otra parte, la lista de obispos provenientes del Opus Dei incluye a Alfonso Delgado Evers, nacido el 21 de junio de 1942 en Rosario, Argentina, ordenado el 23 de junio de 1970, consagrado obispo de Santo Tomé en 1986, de Posadas en 1994 y arzobispo de San Juan de Cuyo en 2000; Juan Ignacio Larrea Holguín, nacido en Buenos Aires en 1927, ordenado en 1962 y actualmente arzobispo emérito de Guayaquil; Francisco Pólit Santillán, nacido en 1938, ordenado en 1963, nombrado obispo de Santo Tomé, Argentina, en 1994.
Los Legionarios de Cristo fueron fundados en México, en 1941. Es al igual que el Opus Dei, una organización muy poderosa, que actúa en el ámbito de la educación privada, del asistencialismo, de los medios de comunicación y del activismo provida, para lo cual ha formado específicamente varias organizaciones para promover la "castidad" y los "valores familiares", entre las que operan en Argentina se cuentan Juventud Misionera y Familia Misionera, organizaciones internacionales creadas en México para la “evangelización de la sociedad mediante misiones rurales y urbanas”.
Tradición, Familia y Propiedad, fue fundada en 1960 en Brasil. Encarnó la forma extrema de los grupos anticomunistas, pero actualmente se ha reconvertido en un movimiento de corte provida. Apoyó a los gobiernos militares de Pinochet en Chile y de Videla en Argentina, donde uno de sus fundadores fue el profesor Mario Amadeo, del Movimiento Nacionalista Argentino, quien fue embajador de su país en Brasil (1967) y en las Naciones Unidas, y luego fue miembro del Consejo Pontificio de Justicia y Paz, y uno de sus dirigentes fue Cosme Beccar Varela, socio de una importante firma de abogados.
Desde aquellos tiempos del anticomunismo violento, encarnado por grupos como TFP y por dictaduras militares como la que gobernó Argentina, personajes y grupos de la ultraderecha católica de ese país habían establecido relaciones de colaboración con sus homólogos de otras naciones, como ilustra el hecho de que en la red electrónica (cable modem.libertel.com.ar) un militante católico argentino haya relatado detalles poco conocidos de la fundación de los Cruzados de Cristo Rey, grupo mexicano vinculado a organizaciones secretas y fundado para actuar dentro del ejército.
Según esa narración, personaje cercano a ese grupo mexicano, en los años 70, fue el cardenal Octavio Nicolás Derisi, fundador de la Universidad Católica de Argentina, a la vez que defensor entusiasta del régimen militar y duro crítico de las organizaciones de derechos humanos. Más aún, el extremismo católico de esos dos países ha encontrado supuestos mártires con perfiles similares en el mexicano Ramón Plata, asesinado en 1979, organizador tras bambalinas de los Cruzados de Cristo Rey y de otros grupos y en el argentino Carlos Alberto Sacheri (1933-77), los dos defensores a ultranza de la tradición, los dos asesinados supuestamente por razones ideológicas.
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